Modesto Martínez Llevo mucho tiempo
queriendo escribir un pequeño homenaje - recuerdo a todos aquellos que de una
forma y otra el virus ha modificado su día a día. Muchos vecinos de Alboraya,
no importa la cifra, demasiados siempre; han fallecido a causa de la Covid 19.
Demasiadas las familias que han tenido que guardar luto, excesivo el
sufrimiento que ni quiero ni debo cuantificar. Otros han tenido que cerrar
negocios, modificar hábitos o sencillamente cambiar su forma de vida por culpa
del virus.
Alboraya y sus
vecinos han sido un ejemplo de temple, resistencia y resiliencia, en muchos
casos, a lo largo del ultimo año. Han
demostrado que en situaciones difíciles este pueblo, esta gente, es capaz de
sacar fuerzas de flaqueza y sacar lo mejor de nosotros mismos. Hemos visto la
solidaridad, el trabajo de gente anónima que ha hecho más llevadero este quebranto
en nuestras vidas.
Hoy solo quiero
rendir, escribiendo estas palabras, un humilde pero sentido homenaje a mis vecinos. A todos ellos
porque todos hacéis de Alboraya
sea un gran pueblo. Todos, los del casco
urbano, los de la huerta y los de la playa. A todos os transmito mi solidaridad
a la vez que mi ilusión porque tras el temporal siempre sale el sol y juntos haremos
que esto pase, que vuelva a brillar un municipio como el nuestro. En el que
creo y lo hago con conocimiento de causa, lo hago porque conozco a sus gentes.
Sin más, rindo respeto a los que nos han dejado. A todos los que han ayudado.
Sí, a todos sin distinción. Nunca deber quedar como cifras, son vecinos.
Es momento de esforzarnos
más si cabe por la memoria de todos los que se han marchado pero también por
trabajar por los que nos quedamos. Alboraya siempre ha sido un pueblo fuerte y
trabajador y de esta, no lo pongo ni en duda, pese a algunos: saldremos más
fuertes.
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