Las varices son partes de las venas que se dilatan y suelen aparecer
sobre todo en las piernas, causando sensación de cansancio y pesadez, en
ocasiones. Esta dilatación de las venas es más común entre las mujeres
(el embarazo, por ejemplo, favorece la aparición de varices) y entre las
personas que deben permanecer muchas horas de pie sin moverse. Las
varices reflejan un problema del aparato circulatorio.
Ofrecemos diversos remedios naturales y caseros para mermar las
molestias ocasionadas por las varices:
INFUSIÓN DE CASTAÑA DE INDIAS
Cocer una cucharada de castaña de Indias en medio vaso de agua durante
tres minutos. Dejar reposar otros cinco minutos y colar.
Antes de tomar se puede endulzar, pero nunca con azúcar refinado.
Podemos usar melaza, miel o azúcar moreno.
Forma de tomarlo: Tres veces al día, antes de las comidas, durante 10
días. Dos veces al día los siguientes 10 días y una infusión diaria de
‘mantenimiento’.
PASTA DE AJOS Y LIMÓN
Se usan seis dientes de ajo, dos cucharadas de aceite de oliva de
primera presión en frío y el zumo de un limón.
Se mezclan todos los ingredientes en un tarro de boca ancha, el ajo lo
habremos cortado en láminas. Se deja macerar la mezcla durante 12 horas.
Este ungüento se utiliza por la noche, antes de acostarse. Se mueve la
mezcla dentro del tarro e introducimos los dedos. La cantidad de
macerado que quede en ellos será suficiente para masajearnos las piernas
en círculos ascendentes siguiendo la dirección de las varices.
Se recomienda tapar la zona al acostarse con un calcetín o media de
algodón.
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