Fue detenido en la operación Clonado de la Guardia Civil El pedófilo de Segorbe detenido el 15 de
julio de 2016 durante la operación Clonado de la Guardia Civil de Castellón al encontrarse un disco
duro de su propiedad, abandonado en el camino del Campo de Segorbe, se sentará el próximo
día 18 en el banquillo de la Sección Primera de la Audiencia Provincial para
enfrentarse a una pena de nueve años de prisión. La Fiscalía lo acusa de un
delito de corrupción de menores, en la modalidad de distribución de pornografía
infantil.
Fue un vecino quien, por casualidad y
mientras daba un paseo por el camino del Campo de la localidad, encontró una
bolsa con ropa y un disco externo. Esta persona decidió llevarse el aparato
informático a su domicilio y, al conectarlo al ordenador, descubrió una gran
cantidad de archivos de pornografía infantil, por lo que cogió el disco de
memoria y lo llevó al cuartel de la Guardia Civil.
Según refleja el escrito de acusación del
Ministerio Público, tras la entrada y registro judicial en el domicilio del
acusado, ubicado en la capital del Alto Palancia, por parte de efectivos del equipo de
Policía Judicial de la Guardia Civil de la Vall d’Uixó y del equipo de
Investigación Tecnológica (EDITE) de la Comandancia , en septiembre de
2016, se comprobó que el hombre estaba descargando archivos y, a su vez,
compartiendo, a través de aplicaciones P2P con ánimo libidinosos, dado que
dichos archivos de vídeo e imagen mostraban a menores realizando actos de carácter sexual sobre sí
mismos, con terceras personas e incluso con animales.
El fiscal considera que los hechos
constituyen un delito de corrupción de menores en la modalidad de distribución de pornografía
infantil, de acuerdo
al cual interesa la pena de prisión de nueves años, así como inhabilitación
especial para el ejercicio de cualquier profesión relacionada con los menores
por tiempo de 14 años y la medida de libertad vigilada por tiempo de 10 años.
Según publica el diario El Mundo, los
archivos identificados, que ascienden a más de 5.000 vídeos e imágenes, habían sido
obtenidos por el acusado con igual propósito libidinoso a través de un programa
de intercambio de ficheros, siendo conocedor de que al descargarlos facilitaba
su difusión pues los ponía a disposición de quien quisiera obtener copias de
los mismos.
Tal y como indica el escrito de acusación
del representante del Ministerio Fiscal «algunas de las imágenes de los
archivos mostraban a
menores en situaciones especialmente vejatorias y sometidas a actos de
violencia sexual». Así se podían ver una menor realizando
una felación a un perro o la menos menor atada de pies y manos con los ojos
vendados.
El periódico Mediterráneo señala que las
pequeñas, algunas de ellas con edades entre 3 y 5 años, aparecían incluso,
atadas de pies y manos, encerradas en una jaula para el transporte de animales
o con expresiones escritas en su cuerpo tales como «mátame».
También se puede observar varias
fotografías de una menor desnuda manchada por sus propias heces, fotos de una
menor con pinzas en sus pechos con claro síntoma de dolor o una menor de unos 3
años en la bañera haciéndole una felación a un adulto.
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