Ante lo que esta sucediendo en Cataluña
es necesario indicar, desde mi punto de vista, que la respuesta a
los problemas políticos debe ser política, puesto que no hay
legitimación en la legislación española ni en el Estatuto de
Cataluña para iniciar un proceso de segregación de Cataluña del
resto de España.
Pienso que , tampoco los resultados de las elecciones catalanas
legitiman el proceso de independencia de Cataluña.
La realidad es que estamos ante un problema de envergadura, que
se esta magnificando por algunos medios de comunicación muy
partidistas y sobretodo por partidos conservadores , lo que está
generando una fractura importante en el país, que no se resuelve con
medidas judiciales, sino políticas.
Hay que buscar una salida política, y el marco tiene que ser el
Congreso que se forme después de las elecciones generales del 20D,
y así superar el actual clima preelectoral,
La solución,, pues, para la evitar la confrontación política,
debiera ser política, por lo que es urgente y necesario que se abra
un debate para la reforma de la Constitución, que desde mi punto de
vista esta agotada. Dicha reforma se debe producir con el máximo
consenso y sometida su aprobación en un referéndum, “para que
decidamos todos”, es decir “el conjunto de la ciudadanía”.
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