Tuberías que transportan el agua del trasvase Tajo-Segura, a su paso por la huerta oriolana . EFE/Morell/Archivo
El trasvase Tajo-Segura sigue vigente "se diga lo que se diga y desde donde se diga" a partir de lo decidido este martes en el Consejo Nacional del Agua, en un acuerdo "mucho más favorable" para los intereses de las cuencas deficitarias, entre ellas la Comunitat Valenciana, porque "mantiene claramente" la transferencia desde los pantanos de Entrepeñas y Buendía.
Así lo ha asegurado hoy el president de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, en la inauguración del Foro Municipalismo organizado por el Club Información de Alicante, donde ha pedido abordar el problema del agua "desde la racionalidad y el diálogo" con el objetivo de conseguir "agua para siempre y a un precio razonable", y lejos "del barro partidista".
Según Puig, "ayer se ratificó un acuerdo del Tajo-Segura que, con toda las dificultades, es mucho más favorable de lo que estaba previsto inicialmente" para los agricultores del sur de la Comunitat Valenciana porque "mantiene claramente el trasvase se diga lo que se diga y desde donde se diga".
Ha proseguido que el acuerdo facilita "trabajar con soluciones estables e ir evolucionando al gran objetivo del agua para siempre desde todos los recursos disponibles" a partir de la reutilización, la desalinización "a unos precios razonables y asumibles" para los regantes "y también, sin duda, el trasvase".
Puig ha argumentado que el trasvase se garantiza no solo por la cláusula adicional sobre que en 2025 se revisará sino también porque se avanza en un Tajo "vivo y en mejores condiciones" a través de actuaciones concretas.
En este punto, ha manifestado que el Gobierno central invertirá más de mil millones de euros en inversiones para reutilizar adecuadamente "los centenares de hectómetros cúbicos" que se pierden cada año desde la Comunidad de Madrid, y ha añadido que una vez que se consiga esto "se podría mejorar sustancialmente el agua del Tajo y su seguridad en el futuro".
"Las inversiones previstas de más de mil millones que, por cierto, va a pagar el Gobierno de España cuando aquí lo pagan los alicantinos, los valencianos y los castellonenses, aunque estamos de acuerdo que lo pague (el Ejecutivo central) porque lo que queremos es que se depure de una vez el agua de Madrid", permitirán que haya "un antes y un después en la sostenibilidad del Tajo" que beneficiará a la situación del río.
Puig también se ha referido al trasvase intravalenciano Júcar-Vinalopó, "hasta hace poco una quimera y que ahora fluye de agua y esperanza" para "generar seguridad y estabilidad" a los agricultores.
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