Puig proyecta en Orihuela el primer centro europeo de estudio de inundaciones

La ciudad de Orihuela albergará el primer centro europeo específicamente dedicado al estudio y a la propuesta de medidas para minimizar el impacto de las inundaciones en el Mediterráneo, en el contexto del cambio climático.

El president de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, ha hecho este anuncio en la jornada científica que, en el marco del plan Vega Baja Renhace, reúne hoy en la ciudad oriolana a expertos nacionales e internacionales en climatología para la futura puesta en marcha de medidas en la comarca para paliar los efectos del cambio climático, cuando se cumplen tres meses de las inundaciones por la gota fría o DANA.

El president ha explicado que este centro estudiará "todos los cambios extraordinarios que se están produciendo" en el Mediterráneo y analizará "cómo adoptar las respuestas más oportunas".

Sin concretar cuándo podrá estar operativo, ha dicho que su configuración será fruto de lo que determinen los técnicos que, como en jornadas como la de hoy, debaten sobre las medidas más eficaces.

Puig ha señalado que "no se puede actuar sin reflexionar antes", por lo que es necesario "acertar en el diagnóstico para no repetir los errores del pasado".

Puig ha insistido en que esta iniciativa no es "una ocurrencia" y ha confiado en contar con la colaboración de las universidades y otros centros europeos.

Ha insistido, además, en que "la especificidad de este centro no está planteada en ningún otro país de Europa, como mínimo".

Sobre el fondo de solidaridad europeo para paliar parte de los daños de la gota fría o DANA del pasado septiembre, ha puesto de manifiesto que lo que tiene que pedir el Gobierno de España y ha continuado que espera que esto se produzca, pese a lo cual ha advertido de que estas partidas no son fundamentales sino que tienen un carácter "limitado".

Asimismo, Puig ha dado cuenta de la aprobación en las próximas semanas de un decreto por parte del Consell de entre 20 y 30 millones de euros para "ayudar a los agricultores que han sufrido directamente daños en las infraestructuras agrarias" durante la reciente gota fría.

En particular, están dirigidas "a particulares y cuestiones que no pueden resarcirse por la vía de los seguros".