El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha lamentado que los efectos del episodio de lluvias en la Comunitat van a tener consecuencias económicas y sociales "muy graves", que necesitarán una respuesta "contundente", y ha reclamado un "Plan Marshall" de ayudas para la comarca de la Vega Baja del Segura.
Puig ha hecho estas declaraciones a los periodistas durante la visita que esta tarde ha realizado al municipio alicantino de Almoradí, donde las fuertes lluvias han provocado la rotura de la canalización del río Segura y las aguas han inundado la población, y cuya situación, ha informado, "va a mejor" ya que se está taponando la zona afectada.
El president ha estado acompañado durante la visita por la alcaldesa de Almoradí, María Gómez, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea.
Puig ha destacado el "gran esfuerzo" que han realizado en las últimas horas tanto desde el ayuntamiento, como la CHS, la Unidad Militar de Emergencias (UME) y "todos los recursos disponibles", y ha manifestado que "si todo va bien podremos dar en las próximas horas tranquilidad" a los vecinos de Almoradí.
Las previsiones de la Confederación Hidrográfica del Segura, ha indicado, son que el caudal del río baje lentamente, aunque todavía tiene aportaciones importantes de agua procedente de las montañas y de la zona de Murcia.
Del mismo modo ha pedido a los ciudadanos que extremen la "prudencia", ya que aunque las previsiones meteorológicas son que la DANA (depresión aislada en niveles altos) se desplace de esta zona hacia el oeste de la península "no se puede descartar que vuelva algún tipo de aparato eléctrico o lluvias".
Puig ha lamentado que el peor balance de este episodio de lluvias histórico en la zona son las dos víctimas mortales en la Comunitat, seis en toda España.
Ha asegurado asimismo que la prioridad del Gobierno valenciano va a ser "solventar las situaciones de las personas que los están pasando peor" y las de "máxima vulnerabilidad" y trabajará por "la recuperación y restauración nos solo de equipamientos sino el alma colectiva que en estos momentos está herida".
En cuanto a los daños materiales, ha lamentado que "el desastre es enorme" y va a tener consecuencias económicas y sociales "muy graves", por lo que hay que "estar preparados para dar una respuesta contundente".
Desde la Generalitat, ha indicado Puig, "lo vamos a hacer y el resto de instituciones estoy convencido que también" y ha manifestado la necesidad de impulsar un "plan Marshall" de ayudas para la Vega Baja del Segura, la más afectada por el temporal.
Al respecto, ha asegurado que tiene el compromiso del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, quien ayer le trasladó en una conversación telefónica que daría la "mayor cobertura" a las necesidades de la zona por su situación catastrófica.
Por parte de la Generalitat Valenciana ha anunciado que el próximo viernes el Consell aprobará en pleno un decreto de ayudas y "a partir de ahí seguiremos avanzando en cuestiones más estructurales para el futuro de la comarca".