Rus con el alcalde de La Pobla de Farnals, José Manuel Peralta. FOTO EPDA Querido Dámaso:
Cada día que sale
el sol es un amanecer cargado de sorpresas, taquicardias, recelos, angustia e
incomprensión. Nos bombardean los medios habados, escritos, virtudes y reales.
Siempre vamos pensando en lo que nos pasará. Y no nos pasa poco.
Por fin el presidente del Partido Popular de la provincia de Valencia, Alfonso Rus, se atreve a decir
“que debemos mantener la cabeza alta, porque el 99% de los políticos de este
partido no han hecho más que trabajar” y “si alguien ha puesto la mano en la
caja que se la corten, pero no podemos permitir que nos digan que todos los
políticos somos iguales y somos unos corruptos”.
Ya era hora que se
digan las cosas con nombre y apellido y en mayúsculas, ya es hora de que cada
cual responda de lo suyo, y ya va siendo hora de que las aguas tomen su cauce
normal y que no nos pase como la canción que nos cantaba hace unos años por
Atahualpa Yupanqui: “Tú que puedes vuélvete, me dijo el río llorando, los
cerros que tanto quieres -me dijo-
allá te están esperando”.
Bien Alfonso, y el
ingrediente principal de la honradez, es la renovación. Mientras los partidos
no hagan verdad en ellos esa palabra difícilmente podremos salir adelante. El
Partido Popular debe oír a los afiliados, debe escuchar al pueblo y debe
apelar a la sabiduría y la experiencia para gobernar con justicia, paz social,
y equidad. Me enorgullece saber que ya hay un dirigente político que apela a la
palabra honradez. Palabra clave, palabra mágica, palabra necesaria.
Hoy voy a ser corto
en mi carta, creo que es una buena noticia que el PP apele a “que es el
momento de estar todos unidos” ¡Cuántas veces lo he dicho en estas cartas! Seguir trabajando, olvidarnos de
historias, pero sin perder de vista la más magistral de las lecciones, la
TRANSPARENCIA, LA RENOVACIÓN Y LA HONRADEZ. Si empezamos a mirarnos en ese espejo, no solo trabajaremos
para ganar, sino que habremos ganado la batalla más grande que hoy hay que
lidiar que es la batalla del descrédito, la batalla de la corrupción y la
batalla de las mentiras.
Creo que es un día
para hacer borrón y cuenta nueva, y tomarse al pie de la letra, la aquella
canción de Carmen Morell y Pepe Blanco: “Es pagar las deudas para todos un
deber; -Di lo que te debo y enseguida pagaré; No querrás pagarlo pero yo lo he
de cobrar. Si no confiesas, qué deuda es esa, nunca la podré pagar. ¡Ay! Que me
debes un beso. ¡No te lo perdono!”
¡Ay Señores que nos
representan elegidos por nosotros, pueblo trabajador y callado, solo nos debéis
HONRADEZ!, es el mejor beso que el pueblo se merece que le brinde un partido
político en el que está confiando tantos años.
Gracias, Alfonso
Rus, por que creo que aún queda mucha gente que puede ir por la calle con la
cabeza bien alta, esa gente es la
que escribe la historia en letras de oro. Esa gente que a veces es
incomprendida, es la única que comprende el pueblo.
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