Rafael Soriano, candidato por UPyD a la Generalitat. FOTO EPDA Rafael Soriano es el candidato a la Generalitat Valenciana por Unión, Progreso y Democracia (UPyD), el partido que lidera a nivel nacional Rosa Díez y que cuenta con representación en el Parlamento español, en el del País Vasco y en el Parlamento Europeo. Ahora, el partido se enfrenta a otra gran prueba de fuego, la de lograr representación en Ayuntamientos y Comunidades Autónomas, este último hecho muy complicado, puesto que la legislación española dificulta la obtención de representación a los partidos minoritarios.
Rafael Soriano es el candidato de UPyD a les Corts Valencianes. Soriano nació en 1971 en Valencia, está casado y tiene dos hijas. Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos de profesión, trabaja en el ámbito de la empresa privada y ha dirigido las obras de la dársena del puerto de Valencia, de 2004 a 2007, para poner en marcha la Copa América.
-¿Cuáles son las previsiones que tiene UPyD en estas elecciones autonómicas?
-A nivel autonómico llevamos un buen ritmo. No tenemos sondeos propios, sólo los datos del CIS y desconfiamos de los sondeos de los partidos, que se hacen más para condicionar el voto. La realidad es que partimos desde el suelo de las elecciones europeas del 3% y, ahora, las encuentas a nivel nacional hablan de más de un 4%. Espero que estos datos también se den en la Comunitat Valenciana y se dé un crecimiento sonstenido que nos permita llegar al 5%. Es complicado, pero podemos llegar. A nivel local, hay plazas donde hemos sido selectivos y en las grandes capitales y pueblos más grandes tenemos grandes posibilidades de obtener representación.
-¿Por qué habría que votar a UPyD?
-En base a un razonamiento casi demoscópico, numérico. Si las encuentas respecto a la opinión de los ciudadanos de los políticos, el 70-80% no confían ni en el PP ni en el PSOE, entendemos que UPyD supone una auténtica regeneración democrática, que implicaría personas dentro de las instituciones alejadas de la política y que buscan la recuperación de la eficiencia en la administración y la gestión adecuada para salir del atolladero en que nos ha metido la clase política dominante. Además, en las ciudades se ha producido un alejamiento inadmisible de los políticos respecto de los ciudadanos y UPyD pretende devolver la política a los ciudadanos.
-Rosa Díez es uno de los líderes mejor valorados, por delante de Zapatero y Rajoy. Sin embargo, su índice de valoración no se traslada a las Comunidades Autonómas. ¿Por qué?
-Fundamentalmente se debe a que estamos emergiendo. El partido nace en 2007 y ya tenemos un eurodiputado, un diputado en el País Vasco y un diputado en el Congreso y los tres con gran consideración por parte de los ciudadanos y sus compañeros. Esto es una hazaña. En la Comunitat Valenciana hay un desconocimiento de los cabezas de lista porque anteriormente no hemos estado en política. Es la primera vez que estamos. Pero estamos en la senda del crecimiento, un crecimiento que va a seguir hasta la confirmación en las próximas elecciones generales.
-¿Cuáles son los principales errores del Gobierno autonómico valenciano?
-El más importante el alejamiento de la acción parlamentaria de los intereses y preocupaciones de los ciudadanos, así como creer que no deben contar con el resto de partidos para mejorar el trabajo. Tantos años de gobierno, lejos de conseguir mejorar las formas y aumentar la eficiencia, lo que ha hecho es creer que todo vale en política, hasta el punto de que se gobierna a espaldas del resto de partidos y sin criterios mínimos de gestión, de manera que se ha alcanzado un endeudamiento altísimo. Después han exprimido al máximo una estrategia de victimismo con respecto al gobierno socialista de Madrid, polémicas estériles que no sirven para nada.
-He leído que UPyD modificaría, de tener poder, el papel de las Comunidades Autónomas. ¿Cuál sería el nuevo escenario autonómico?
-Un estudio elaborado en 2009 llegaba a la conclusión de que si se evitan duplicidades administrativas y se gana en eficiencia en la gestión, ahorraríamos 26.000 millones de euros al año. El Estado autonómico ha seguido a partir de 1978 un proceso mediante el cual ha aumentado la descentralización, pero el proceso se rompe con la aprobación del Estatut de Catalunya, un peaje que Zapatero tuvo que pagar tras el apoyo del tripartito. Cataluña y el País Vasco tienen más competencias por conveniencia política. Tras estos privilegios, otras autonomías, como Andalucía y la Comunitat Valenciana, piden lo mismo, lo que hace que el reparto sea asimétrico. Todo esto lleva a que haya una Administración central y 17 administraciones autonómicas, que implica un exceso administrativo y la multiplicación de empresas públicas que generan sobrecostes y el consiguiente bloqueo autonómico. Por todo ello, queremos un vuelta atrás, que permita una redefinición autonómica, de manera que todos los ciudadanos, vivan donde vivan, tengan los mismos derechos y obligaciones.
-¿Algunas de las propuestas más novedosas de UPyD en estas elecciones?
-La reducción de Consellerias y empresas públicas y la disminución de la deuda. A nivel municipal, proponemos la agrupación de los habitantes menores de 5.000 habitantes, no su desaparición, sino la creación de entes administrativos que los gestionen de manera más eficiente. Si en Alemania y otros países no existen municipios de menos de 5.000 habitantes, en España hay más de 8.000 entidades locales.
-En caso de obtener representación, ¿con quién preferirían pactar en la Comunitat Valenciana?
-Pondríamos una serie de condiciones. Pactaríamos con quien se comprometiera a cambiar la ley electoral. Es la que propicia el bipartidismo en la Comunitat Valenciana y la que ha provocado un gobierno absolutamente irresponsable en la Comunitat. El acuerdo sería para elegir al presidente de la Generalitat, pues UPyD no firmaría nunca un pacto de legislatura con nadie.
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