Instante de la presentación del dictamen El dictamen elaborado junto a socialistas, Compromís y Ciudadanos tras el análisis de las 75 comparecencias y de la documentación solicitada sobre el accidente de la Línea 1 de Metrovalencia ocurrido el 3 de julio de 2006 y que causó 43 muertos y 47 heridos incluye como conclusión que el siniestro era previsible y evitable, y que el túnel de la línea no era segura.
La portavoz adjunta de nuestro grupo parlamentario, Fabiola Meco, ha presentado junto a los portavoces de Compromís, PSPV, y Ciudadanos el dictamen elaborado por estos cuatro grupos en Les Corts tras los trabajos realizados desde julio de 2015 en la Comisión de Investigación.
Entre las conclusiones, figura que la Comisión de Investigación que se desarrolló en 2006 no depuró las responsabilidades políticas y que el grupo parlamentario popular, el Consell y la empresa Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) impidieron que se conocieran las causas del accidente porque tenían el objetivo de impedir que se impusiera cualquier otra visión distinta a la oficial.
Este dictamen concluye además que las causas de este accidente fueron múltiples y todas tuvieron su origen en la falta de inversión y la mala gestión de FGV, especialmente en materia de seguridad en la circulación, entre ellas, la incompleta instalación del sistema de frenado, la falta de instalación de balizas o de su reprogramación o el deficitario mantenimiento de la vía en el punto del accidente.
Los parlamentarios de estos grupos políticos estiman que en FGV no había coordinación suficiente y que la seguridad de la circulación se hizo descansar en el factor humano, ante la falta de previsión e inversión en sistemas de seguridad.
En cuanto a la gestión posterior al accidente, el dictamen considera que el Consell no facilitó a las víctimas y sus familiares información y que el entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps, faltó a su responsabilidad institucional al no recibir a las víctimas y a sus familiares.
Igualmente, se estipula que la Comisión Interdepartamental creada para la gestión y coordinación de las conselleries que se vieron afectadas actuó de forma opaca en la gestión e información de las ayudas a los familiares de las víctimas; que hubo una estrategia comunicativa orquestada por parte de los directivos de TVV con Presidencia de la Generalitat para el tratamiento informativo del accidente y que el ente autonómico ofreció información sesgada y no contrastada con otras fuentes, sometiéndose a los intereses políticos del PP. Otra conclusión es que el Consell del PP no atendió las demandas de las víctimas y de los familiares que solicitaban una nueva investigación.
El dictamen señala como responsables políticos al entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps, como responsable de las decisiones del Consell sobre el accidente y del desprecio continuado a la Asociación de las Víctimas del Metro 3 de julio; al vicepresidente del Consejo de Administración y director general de Transporte, Vicente Dómine; al vicepresidente del Consell en aquella etapa, Víctor Campos, al entonces portavoz del grupo popular en Les Corts, Serafín Castellano y al conseller de Agricultura, Juan Cotino.
También señala a quien era la directora gerente de FGV, Marisa Gracia, al entonces responsable de recursos humanos de FGV Dionisio García; al director adjunto de explotación de FGV, Vicente Contreras; al director de operaciones de FGV, Manuel Sansano, al resposable de talleres, Francisco Singüenza y al jefe de taller FGV València Sud, Luis Miguel Domingo.
En cuanto a RTVV estiman que Pedro García es el responsable de la información manipulada sobre el accidente que llegó a la ciudadanía valenciana, y señalan igualmente a Luis Motes.
Por parte de Podemos, las diputadas Fabiola Meco y Cristina Cabedo han interpelado a lo largo de estos meses a las personas que han comparecido. Según Meco, la “verdad oficial” que entonces se empeñó el PP en instalar “ha sido desmontada en esta comisión”.
Fabiola Meco ha admitido que ha sido una comisión “muy dura y emotiva” y ha recordado que, como vecina del barrio de Patraix, pone caras a esta tragedia. “Ha sido un viaje duro en lo emocional, pero hemos trabajado con rigor, con contundencia; no hemos tenido miedo a determinar los responsables”. Ha calificado de “despreciable” la gestión que se realizó por parte del Gobierno del PP y ha afirmado que existió impotencia, desprotección y abuso de poder.
Cristina Cabedo, por su parte, ha destacado que “todos los grupos excepto el PP hemos podido superar las discrepancias para conocer la verdad”.
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