Esta semana se han cumplido seis meses desde que, el pasado 29 de octubre, el cielo se desplomó sobre la provincia de Valencia, descargando millones de litros de agua sobre los cauces de los ríos Magro, Turia y Júcar, así como sobre los barrancos de El Poyo, l’Horteta y Pozalet-Saleta. Todos ellos se desbordaron, anegando las comarcas de l’Horta Sud, el Camp de Turia y la Hoya de Buñol, y desatando una de las tragedias más devastadoras que se recuerdan en la región. Aquel día perdieron la vida 228 personas, cuyas familias siguen clamando justicia.
A esa cifra se suman tres desaparecidos, que si bien han sido dados por muertos a nivel administrativo, a día de hoy, siguen sin aparecer. Sin embargo, sus familiares, continúan exigiendo que no se detenga la búsqueda, aferrándose a la esperanza y al derecho de cerrar su duelo.
Los tres desaparecidos por la dana del 29 de octubre son: Elisabet Gil Martínez, de 38 años, madre de un joven de 19 y una niña de 6, desaparecida en Cheste; Francisco Ruiz Martínez, de 64, arrastrado por la corriente en Montserrat; y José Javier Vicent Fas, de 56 años, visto por última vez en la localidad de Pedralba.
La historia de Elisabet Gil
Elisabet Gil Martínez, conocida por sus allegados como Eli, viajaba como copiloto junto a su madre Elvira Martínez, en un Ford Focus, camino del Hotel La Carreta, en la autovía A-3, donde ambas trabajaban como camareras de habitación. Aquel día, Elvira había terminado su turno, pero acompañaba a su hija, que debía entrar a trabajar a las 17.00 horas.
A las 17:31, Eli envió un vídeo a su jefe, donde se puede ver como el agua les llegaba casi a las rodillas. Era una señal desesperada. Faltaban más de dos horas y media para que la Generalitat emitiera la alerta oficial, que no llegó hasta las 20:12, de aquel fatídico 29 de octubre.
Díez días después, el cuerpo de Elvira Martínez fue encontrado en un campo de naranjos del término municipal de Quart de Poblet, barranco abajo. El vehículo, en el que madre e hija viajaban, apareció en febrero en el barranco del Poyo, gracias a la incansable labor de la Guardia Civil y la UME. Pero de Elisabet Gil, aún no hay rastro. Seis meses después, su búsqueda continúa sin descanso.
Francisco Ruiz: el héroe de Montserrat que salvó a sus nietos en la riada
Francisco Ruiz Martínez, de 64 años, desapareció el pasado 29 de octubre en Montserrat (Valencia), tras poner a salvo a sus dos nietos, de 5 y 10 años, durante la fuerte riada provocada por el desbordamiento del río Magro. Aquella tarde, la ferocidad del agua sorprendió al vecino de la localidad en el polígono industrial. Francisco, que había acudido allí con los niños, apenas tuvo tiempo de reaccionar: logró subir a sus dos nietos al techo del coche, pero fue arrastrado por la corriente.
Fueron los propios menores quienes contaron a las autoridades cómo vieron a su abuelo desaparecer entre las aguas. “El agua se lo llevó”, dijeron, siendo testigos directos de la mayor tragedia de la Comunitat.
Desde entonces, la familia de Francisco Ruiz, no ha cesado en su búsqueda. Durante estos seis meses, sus hijos y vecinos han organizado batidas por la zona, sin éxito. A pesar de los esfuerzos también por parte de los equipos de rescate, el cuerpo de Francisco nunca ha sido localizado.
José Javier Vicent: el hombre desaparecido en Pedralba
José Javier Vicent, de 56 años, desapareció en la localidad de Pedralba, en la comarca de Los Serranos, mientras se encontraba en su vivienda, situada junto a un barranco. Dos días después de la tragedia, el cuerpo sin vida de su hija Susana, de 30 años, fue hallado en una playa a varios kilómetros de distancia. Seis meses más tarde, la búsqueda de José Javier continúa sin resultados.
Susana Vidal, esposa del desaparecido en la Dana de Valencia, relató a los medios que la última vez que tuvo noticias de su marido y de su hija fue el martes 29 de octubre, a las seis de la tarde, cuando recibió un mensaje de WhatsApp en el que su marido le advertía de la cantidad de agua que pasaba cerca de su casa.
Declaran como fallecidos a 2 de los 3 desaparecidos en la dana
Las familias de los tres desaparecidos de la riada enfrentan no sólo la pérdida, sino también la incertidumbre. A pesar del tiempo transcurrido, no hay avances significativos en las investigaciones. A finales de febrero, los juzgados de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Picassent y de Primera Instancia número 2 de Valencia declararon oficialmente fallecidos a Francisco Ruiz Martínez y a José Javier Vicent, tras la solicitud de sus familias.
La decisión judicial se basó en los artículos 193 y 196 del Código Civil, que permiten declarar fallecida a una persona desaparecida en circunstancias excepcionales -como una catástrofe- incluso antes de que transcurran los seis meses estipulados por ley, siempre que no se haya tenido ninguna noticia de su paradero. El caso de Elisabet Gil, otra de las desaparecidas, sigue pendiente de resolución en un juzgado de Requena.
No obstante, la Guardia Civil mantiene activa la búsqueda de las tres personas desaparecidas tras la riada. Tal como confirmó en marzo la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, la Benemérita sigue liderando este operativo.
Seis meses después de la tragedia que sacudió a la provincia de Valencia, las familias aún esperan recuperar los cuerpos de sus seres queridos y cerrar su duelo. Reclaman respuestas y responsabilidades al gobierno autonómico, cuya gestión de la dana del 29 de octubre sigue sin aclararse.