Un sábado cualquiera antes

De que vuelva a jugar el Valencia. Como en aquellas películas en que el río arrastra al chico y a sus amigos, por supuesto en aquella jodida excursión en que todo se ha ido complicando. Y ahora todos van a la deriva entre los salvajes rápidos que cada vez más aterrorizados te llevan hacia la más que probable y final catarata...

Mientras esta misma semana, de a miles de kilómetros en un lejano reino oriental, desde el reputado paraíso (fiscal) de Singapur, nos llega la foto triunfante de un senil Peter Lim, disfrazado de jovencito, junto a otro reputado evasor, también conocido por "El Bicho", Cristiano para los amiguetes. Dando fé los cuates y una vez más, de lo que se las suda el Valencia más sus accionistas y sus aficionados. Salvas sean las comisiones. Faltaría más.

Pero que no cunda el pánico, que también está mismita semana nuestra simpar presidenta

Layhoon se ha dignado incluso a visitar a los muchachos en Paterna. Loado sea Dios! Aunque no se sabe si para darles ánimos o la extrema unción. Que con esa cara de poker que se gasta la menda todo es posible. Por lo que ya está todo arreglado. Si es que alguna duda razonable aún nos quedaba.

Y si me preguntas por Salvo o por Aurelio, sólo decirte que ambos se han internado voluntariamente eso sí en una clínica de postín de esas que hay en Marbella. Pues el otro día en el interrogatorio que tan injustamente padecieron en la Ciudad de la Justicia valenciana, ambos advirtieron con honda preocupación como aumenta este Alzheimer selectivo pero galopante sobre porqué y por cuánto, le entregaron en su día el Valencia al amiguete tan oriental de Cristiano. Valgame Señor.

Continuaremos informando.