Clara Quiles Vila /EPDA Se acerca el 25 de Noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres. Porque sí, porque existe una violencia que se ejerce contra la mujer por el mero hecho de ser mujer. Porque piensan que somos suyas. Porque aún, aunque sorprenda, hay quien piensa que tenemos que someternos a las órdenes del varón. Y si no, bofetón.
Lo vemos a diario en los titulares de las noticias: “otra mujer muere asesinada a manos de su pareja. Ante el maltrato tolerancia cero”. Lo vemos en la tele y en las calles. En las redes y en los juzgados. Y ello, aunque se empeñen desde la bancada de la extrema derecha, no está reñido con el hecho de que existan otras violencias que también hay que combatir.
Poner en cuestión la existencia de la violencia de género, como espetó aquella exdiputada de apellido Olona, además de faltar a la verdad, supone una contradicción evidente con el constante discurso de odio que se nos ofrece desde la derecha recalcitrante. Para ellos, -y frente a los que debemos tejer una alianza transversal de partidos, asociaciones y sociedad civil en general-, la violencia no tiene género aunque la mayoría de víctimas en el ámbito de la pareja sean mujeres pero la delincuencia sí tiene nacionalidad porque, -según ellos y falseando la verdad- la mayoría de delitos los cometen extranjeros. Acabáramos. La estadística solo les vale cuando y para lo que les interesa, que es sembrar odio.
Frente a ello, todos los partidos que no comulguen con los postulados machistas, debemos tejer y firmar una alianza para obligarnos unos a otros a conservar los pactos y consensos a los que tanto nos ha costado llegar.
Por nuestra parte, en Massanassa, ofreceremos a todos los partidos del municipio, un acuerdo de mínimos que nos obligue a no firmar pactos con partidos que no respeten los Derechos Humanos. Es decir, propondremos firmar una auténtica alianza por la igualdad, ante el empuje de la extrema derecha, que ya se dispone a llamar a las puertas de nuestras instituciones y que pretende llenar de machismo y odio los ayuntamientos de todo el país.
Ante su machismo, una alianza por la igualdad.
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