Belén Esteban llora desconsolada. FOTO TELECINCO.ES Gran Hermano Vip está arrasando en audiencias en Telecinco, tanto en las galas de los jueves, como en el debate de los domingos y también los Última Hora del prime time de los lunes y miércoles -superando incluso a El Intermedio e igualando a El Hormiguero-. La clave del éxito está en el casting, con personajes tan atractivos como Belén Esteban, Kiko Rivera u Olvido Hormigos. La pelea precisamente entre la de los Yébenes y la princesa -vulgar e histérica- del pueblo ha disparado los audímetros.
El jueves, la Esteban y su poder mediático, acabaron con la ex concejala socialista. Una Belén Esteban que se está embolsando, según algunos medios digitales, unos 65.000 euros semanales, y que sigue haciendo caja hablando de Jesulín de Ubrique, de su hija, y mostrándose como ella es. Lo dijo cuando entró en el programa y lo está cumpliendo... para su propia desgracia. Puesto que Belén Esteban en estado puro es: vulgar, histérica y cateta.
Porque una cosa es ser natural, sencilla y 'víctima' de la fama de un torero que se reconocía mujeriego y con mucho éxito entre las mujeres. La mujer abandonada. La esposa expulsada del clan familiar. Simpatizaba y empatizaba con ese perfil. Pero la Belén Esteban que se muestra en Gran Hermano Vip está desequilibrada, sobreactuada y, en definitiva, es una caricatura de sí misma. Además de un mal ejemplo para quienes la consideran como un modelo a seguir e imitar.
Pero al programa esos perfiles le funciona de lujo. Y tras el gran enfrentamiento entre la Esteban y la Hormigos, nuevos momentos de choque llegarán de la mano de la princesa del pueblo y del resto de fauna dispuesta a cualquier cosa para llegar hasta el final. Negocio redondo para Mediaset, cuya cadena principal sigue sumando décimas dispuesta a liderar un mes de enero que parecía estar del lado de Antena 3.
Ylenia, la choni de Benidorm, consuela a Hormigos. FOTO TELECINCO.ES
Comparte la noticia
Categorías de la noticia