Ribó, durante los Desayunos de Efe en el Colegio de Abogados de Valencia . EFE El alcalde de València, Joan Ribó, no quiere que los solares municipales
sean "un nido de ratas" y anuncia un plan de actuación en una
treintena, que afectará a 90.000 metros cuadrados, para convertirlos en
instalaciones deportivas básicas y aparcamientos, así como ceder otros
para actividades sociales.
Ribó ha explicado en Los desayunos de
EFE en el Colegio de Abogados de Valencia que en concreto hay tres
solares que planean ceder a instituciones de investigación, caritativas o
de ámbito formativo porque consideran "importante que tengan una
función" social.
Además, en una primera fase, el consistorio
actuará en siete solares -22.000 metros cuadrados-, para hacer
aparcamientos "en zonas donde haga falta" o convertirlos en
instalaciones deportivas básicas, que puedan revertirse por necesidades
municipales.
También en materia de urbanismo el alcalde ha
asegurado que esta legislatura es el momento de "dignificar" la ciudad y
"darle un toque serio a sus cuatro grandes plazas" (Ayuntamiento,
Reina, Mercado y San Agustín) para conseguir un centro histórico si no
totalmente peatonalizado, sí cerrado al tráfico de coches privados.
"El
proyecto de la Reina está a punto de contratación. Eso ocasionará
cambios muy importantes a nivel de EMT y de circulación y afectará
indirectamente a toda la movilidad de la plaza del Ayuntamiento. No sé
si será esta año, pero en 2020 ya seguro", ha afirmado.
Ha
recordado que para la plaza del Mercado ya tienen el proyecto, que ha
costado "dinero y mucho tiempo" pero "ya está arreglado" y falta la
reorganización de la plaza San Agustín.
Otro proyecto urbanístico
importante que acometerá este mandato es la remodelación de la fachada
marítima de la Malvarrosa y el Cabanyal, donde "las playas son cada vez
más anchas como consecuencia de la ampliación del puerto" y donde la
actuación hay que articularla junto al Plan del Cabanyal.
El
alcalde ha resaltado que el paseo marítimo se llena de arena con cada
tormentas y, tal y como anunció en campaña electoral, plantea mejorarlo y
protegerlo con palmeras y dunas, una iniciativa que puede incluirse en
la declaración de impacto ambiental de la ampliación del puerto.
"Son
proyectos ambiciosos", que van a "dignificar" y a "cambiar mucho" la
ciudad, a lo que también contribuirá el Parque Desembocadura en Nazaret,
los avances en movilidad, la ampliación de parques y jardines o el
ahorro del gasto energético, que con el cambio a luces led ya llega a 15
millones.
Durante el desayuno el alcalde también ha defendido la
creación de tasas como la del alcantarillado, que según fuentes
municipales, recaudará lo mismo en la parte de inversión, que no varía
en el recibo (6,6 millones) y que tendrá una subida en la de consumo,
"calculada para que se cubran las inversiones", y cuyo ingreso pasa de
12 a 18 millones.
En su opinión, los impuestos "tienen una
función redistributiva en una sociedad profundamente injusta" y, ante
las críticas de la derecha por la subida de impuestos como el IBI -lo
mantendrán el 3 % que sube el Gobierno sin compensarlo como otros años-,
les insta a "decir claramente" si piensan que no hay que redistribuir.
Por
otro lado, ha reconocido el atasco en las licencias urbanísticas y de
actividad y ha explicado que trabajan en procesos para "acelerarlas"
mediante Organismos de Certificación Administrativa (OCAs) con convenios
con colegios profesionales de arquitectos e ingenieros técnicos y
confía en que "en un año, podamos coger bastante velocidad", a la par
que admite que los "perjudicados" son el Ayuntamiento y los empleos.
Respecto
a los conflictos con el puerto, además del de si su ampliación necesita
la declaración de impacto ambiental, está también el acceso norte, cuya
solución, a su juicio, pasa por acelerar la mejora de la conexión
ferroviaria, algo "fundamental" para el nodo del Corredor Mediterráneo
que es València.
Por ello, considera que "hay que convencer al
Gobierno" de que la solución es "dedicar esos recursos del acceso norte"
al túnel de Serrería, a potenciar las conexiones nacionales e
internacionales y mejorar la de Zaragoza y el Cantábrico.
"También
hay que convencerlos de que València necesita unas inversiones
ferroviarias importantes y de que la Autoridad Portuaria no tiene los
recursos ilimitados. En estos momentos, lo fundamental es dedicar esos
recursos a resolver el nodo ferroviario de la ciudad y el puerto",
sentencia.
Ha admitido además que el cierre de playas este verano
por bacterias fecales ha provocado "una publicidad negativa clara" pero
ha recordado que ha sido un problema generalizado en varios municipios
costeros y que la Generlitat ha impulsado una comisión que estudia sus
posibles causas para dar solución y evitar que se repita.
Para
Ribó, la "clave" es la falta de conexión al alcantarillado general de
viviendas y masías antiguas y la tarea de la comisión es su localización
y posterior conexión a las redes de alcantarillado para solucionarlo
"rápidamente".
Alquiler de patinetes
El Ayuntamiento de València no va a permitir la actividad en la ciudad
de empresas de alquiler de patinetes eléctricos a través de aplicaciones
móviles porque, según el alcalde, Joan Ribó, su presencia "puede
generar más problemas que beneficio".
Así lo ha sostenido en Los
Desayunos de la Agencia EFE en el Colegio de Abogados de Valencia, donde
ha defendido que este tipo de vehículos de movilidad personal podrá
desplazarse por la ciudad siempre y cuando se alquilen a empresas que
tengan puntos fijos para recogerlo y devolverlo.
"Nos llegan
experiencias de ciudades como Lisboa o Ámsterdam donde el patinete se
deja tirado en cualquier sitio y es un problema para la circulación de
las personas andando", ha detallado, a la vez que ha incidido en que en
otras como ciudades como Estocolmo "se están planteando seriamente
quitar el sharing" de patinetes eléctricos.
Según Ribó, es
"importante regularizar" la actividad de motos eléctricas y de
bicicletas eléctricas, una opción que, ha dicho, se plantea introducir
la empresa de alquiler de bicis municipal Valenbisi.
El alcalde
ha añadido que de momento en València circularán los patinetes que sean
propiedad particular de cada usuario o bien de empresas que los alquilan
con ida y vuelta, pero "no patinetes que se puedan aparcar en cualquier
sitio y recoger con una aplicación porque generan muchos problemas", ha
aclarado y ha sentenciado: "De momento, no lo vamos a facilitar".
A
pesar de que la movilidad fue precisamente uno de los asuntos más
polémicos de la gestión municipal la pasada legislatura, Ribó ha dicho
que no han detectado ningún fenómeno de castigo en los resultados
electorales en las zonas donde había más problemas de tráfico y ha
defendido que los cambios "al principio molestan" y generan "lío",
aunque "rápidamente desaparecen".
Ha reconocido que los
principales problemas de movilidad de la ciudad se producen en las
entradas y salidas porque se carece de "una movilidad metropolitana" y
el metro "tiene poco de metro y mucho de tren de Cercanías" porque "no
está bien conectado".
Como ejemplo, se ha referido a la L10 de
Metrovalencia, paralizada durante años y que el actual gobierno ha
reactivado aunque, según Ribó, "no puede ser una línea aislada del
resto, hay que conectarla por calle Alicante y la zona Cabanyal".
Es
"muy triste", según el alcalde, que en la última década haya disminuido
el número de viajeros de la red de trenes de Cercanías, lo que "para la
ciudad es terrible" por los problemas que conlleva y ha apuntado que se
pueden solucionar "con infraestructuras, pero también con una gestión
del tráfico".
Ribó ha defendido que el problema de la movilidad
"no" es solo de ciudad, sino que se tiene que abordar con la Generalitat
y con el Gobierno.
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