El concejal de Hacienda, Ramón Vilar, en una imagen de archivo. EFE/Biel Aliño/Archivo El Ayuntamiento de València destinará los cerca de 29 millones de euros que recaudará con los ajustes y actualizaciones de los diferentes impuestos y tasas municipales a financiar servicios públicos.
Así, se invertirán 12 millones en el mantenimiento de colectores, alcantarillado y otras infraestructuras de la red de saneamiento, ha explicado el concejal de Hacienda, Ramón Vilar, tras la reunión que ha tratado la modificación de las Ordenanzas Fiscales para 2020, que se aprobará de forma inicial en el próximo pleno municipal.
"Estamos realizando un cuadro de ajuste fiscal, tanto en tasas como en impuestos, con una actualización, porque queremos incrementar servicios tales como la recogida de basuras o la seguridad ciudadana, con la contratación de 250 policías y cerca de 60 bomberos que hoy se incorporaban a la academia y que ya son funcionarios municipales", ha concretado.
Según un comunicado municipal, Vilar ha dado cuenta de la evolución de algunos tributos y tasas y ha sostenido que "no pueden bajarse si se quiere incrementar los servicios".
En el caso el IBI, ha explicado que "llevaba congelado desde 2010" y en esta ocasión, la subida del 3 % dispuesta por el Gobierno a las ciudades que llevan más de diez años sin renovar los valores catastrales, "no va a ser absorbida por el Ayuntamiento":
Vila ha hablado de "la complejidad de adaptar las ordenanzas a los impuestos, y a los supuestos de la ley", y ha explicado que el Ayuntamiento no ha podido incrementar la bonificación del 50 % del IBI que se aplica a las viviendas que utilizan energías renovables.
Ha resaltado que el Ayuntamiento ha aumentado las bonificaciones posibles para reducir la cuota de los recibos del IBI y que se mantiene exenciones para los propietarios de tierras agrícola que las mantienen activas.
Igualmente, hay beneficios para salas de actuaciones de audiovisuales y de artes escénicas, que pueden contar con una bonificación de hasta el 60 % en el caso de llevar 30 años de actividad ininterrumpida, o de que un 20 % de su programación, siempre que esta incluya un mínimo de 16 espectáculos en valenciano.
También contarán con bonificación los propietarios de aquellos inmuebles que utilicen energías renovables y a establecimientos históricos, catalogados como emblemáticos, que se les aplicará la máxima bonificación (95 %), así como se mantiene las bonificaciones a las familias numerosas.
El Ayuntamiento también ha realizado un ajuste en los tipos de los Bienes de Características Especiales y Usos Diferenciados para grandes valores catastrales, para alcanzar la cuota tributaria media de las ciudades españolas de más de 500.000 habitantes.
Ha explicado que la actualización del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) no afecta al pequeño comercio sino que se dirige a aquellas empresas con una facturación superior a un millón de euros.
"Con todo, esta carga impositiva, que puede suponer unos 400 euros anuales, es inferior a la de otras grandes ciudades como Zaragoza y Sevilla", ha matizado.
Asimismo, ha destacado que la subida impositiva por ocupar la vía publica con mesas y sillas "sólo afecta a los locales de restauración del centro y la zona de mayor afluencia turística, según un estudio realizado hace tiempo por la Universidad Politécnica de València".
También ha defendido que la modificación de la tasa de alcantarillado, "solo afecta a los grandes consumidores, es decir, a los establecimientos hoteleros de la ciudad, no supondrá un gravamen importante para quien tenga que abonarla dado el momento turístico que se vive en València y que actualmente ha generado 20 solicitudes de apertura".
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