El obispo presidió la reunión La Junta Diocesana de
Cofradías, Hermandades y Asociaciones de Semana Santa ha decidido mantener el
pregón diocesana en la localidad de Vall d’Uixó y la procesión diocesana en
Alcora, siempre dependiendo de las determinaciones de las autoridades
sanitarias.
Ambas poblaciones ya tenían adjudicados
ambos actos de Semana Santa en este mismo año pero debido a la pandemia y al
estado de alarma, se optó por suspenderlas.
La junta diocesana, reunida en
la iglesia del Real Seminario Conciliar de Segorbe y bajo la presidencia del
obispo, Casimiro López Llorente, ha decidido renovar el encargo en ambas poblaciones,
en el caso de Vall d’Uixó para el 28 de marzo y con el 30% del aforo del lugar
donde se celebre y en el caso de Alcora contando con que las procesiones a
fecha de hoy están suspendidas pero se ha comentado que si no es este próximo
año en el mes de abril como se ha barajado, será el siguiente 2022.
Así lo ha manifestado el
consiliario de la junta, Federico Caudé, que lamentaba que “no hacer estas
cosas es ir congelando todos lo que son las actividades de la hermandades y
cofradías de la diócesis y perdiendo la fuerza unión que tienen los cofrades”.
Caudé señaló que lo primero es
la salud de las personas “ y vemos como importante que no seamos nosotros los
que propiciemos los contagios y tenemos que intentar guardar el respeto y
cumplir con las autoridades sanitarias”.
En la reunión quedó patente que
al suspenderse la mayor parte de los actos de Semana Santa de las distintas
cofradías, también se habían suspendido la celebración de las juntas locales,
pero esta se ha mantenido al tratarse de una junta general.
En su alocución final el
prelado mostró su parecer contrario a la Ley de eutanasia y también felicitó las
fiestas navideñas a los presentes.
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