Albert Rivera y Ciudadanos inician el proceso de reunificación del centro derecha en España

He escuchado varias veces decir a Albert Rivera, presidente de Ciudadanos (C's), que ''el centro ha venido para quedarse'', cuando en realidad querría decir que el centro ha llegado para ser absorbido por el centro derecha y para apoyar al Partido Popular a formar una mayoría de centro derecha en España. Era lo inevitable. Para eso nació Ciudadanos. Objetivo cumplido. Enhorabuena.

El espectro ideológico y sociológico a la izquierda del cero -entendiendo el 0 como el centro- está que trina estos días y más que estará en las próximas semanas, cuando se consume el pacto PP-Ciudadanos, que supondrá la reunificación del centro derecha tras la crisis temporal del bipartidismo en España. Por el contrario, el arco 'ideosociológico' a la derecha del cero están aguardando a la rendición final de Ciudadanos para brindar con cava español, muy español.

Pero tampoco debemos rasgarnos las vestiduras. El bipartidismo entró en declive como consecuencia de la grave crisis económica que arrastramos casi una década y por los casos de corrupción que asolan a los partidos tradicionales, desde el PP, pasando por el PSOE o la muerta CIU. Como consecuencia, a la izquierda y derecha del 0 nacieron Podemos y Ciudadanos, que inevitablemente son muletas ideológicas del PSOE y el PP, respectivamente, dado que los nuevos se han quedado muy lejos en apoyo electoral de los viejos. Así las cosas, en diciembre las opciones de formar gobierno eran complicadas, pero podía haber habido gobierno de centro izquierda o centro derecha, pero el tacticismo frustró ambas posibilidades y fuimos a nuevas elecciones. El 26 de junio, el resultado reforzó al PP y a Mariano Rajoy y las opciones de gobierno sólo pasaban por el centro derecha. O eso, o íbamos a terceras elecciones generales, dado que PSOE y Podemos habían retrocedido y se antojaba prácticamente imposible un acuerdo con fuerzas nacionalistas independentistas.

Así llegamos a agosto. Nadie quiere terceras elecciones y, para evitarlas, sólo el PP podía contar con Ciudadanos, el partido de 'centro' que según Rivera había venido para quedarse, cuando en realidad la razón de ser de esta formación es la de convertirse en refugio del voto de centro derecha descontento temporalmente con el PP. Una vez a Rivera, uno de los poquísimos líderes de un invento del Ibex 35 y algunos poderes fácticos en Cataluña y España, se le ha convencido de que no tiene otro remedio que tragarse todos los sapos que escupió durante las dos elecciones generales respecto a Rajoy y el PP, Ciudadanos ha comenzado el proceso de genuflexión inevitable y, finalmente, habrá acuerdo para formar gobierno junto al PP. Dicho lo cual, bienvenidas sean todas las medidas anti y contra la corrupción. Esta parece ser que será la principal aportación de Ciudadanos y así se le recordará cuando desaparezca en los próximos 7 años.