El presidente del Partido Popular de la Provincia de Valencia, Vicente Betoret, ha denunciado hoy que los años de gestión del Gobierno del tripartito han sido "dos años perdidos" para la provincia de Valencia donde la única política ha sido "la venta de humo" detrás de la cual hay una "gestión nociva para la calidad sanitaria, educativa, inversora y para la vertebración del territorio" porque "cuando inviertes cero, el sistema se degrada".
Betoret se ha pronunciado en estos términos cuando se cumplen dos años de las elecciones de 2015 donde los socios del Botànic decidieron "unir sus fuerzas para liderar la política de la no gestión" ya que "estos dos años se han caracterizado por el no a la libertad educativa, no a la política social con la construcción de más centros de salud y colegios en la provincia, no a la vertebración con infraestructuras estratégicas y no a la atención a la dependencia".
El Presidente del PP de la provincia ha tildado de "escandalosa" la "dejación de funciones" en materia de infraestructuras que está generando "que algunos municipios se conviertan en islas dentro de su propia provincia porque hay localidades donde cuesta menos ir a Cuenca que bajar a Valencia". Así, ha recordado que su "política de disidencia" le ha llevado a abandonar infraestructuras como la finalización del último tramo de la CV-309, la ampliación de la CV-429 en Yátova, el tramo de la CV-50 entre Benaguasil-Alzira o la conexión de Titaguas hasta Ademuz, entre otras muchas.
Así, ha denunciado el "apagón inversor" en materia de municipalismo ya que el Consell "sustituye las obras por los titulares".
"Todo lo que tocan se paraliza" ha señalado ya que, según ha explicado las inversiones ejecutadas por el Consell en 2016 apenas superaron el 50%, cinco puntos menos que el año anterior ya que "de los 570 millones de inversión directa, solo ejecutó 292,8 millones de euros. Es decir, el Consell "paraliza uno de cada dos euros que tiene para invertir".
En este sentido, ha indicado que la provincia de Valencia necesita "de forma urgente" la inversión de 100 millones de euros en infraestructuras prioritarias: para construir o mejorar 25 colegios, para realizar actuaciones en 25 centros de salud, mejorar y ejecutar 100 carreteras,20 depuradoras y realizar inversiones en materia de incendios o actuaciones judiciales.
Según ha explicado, en estos dos años la política educativa se ha caracterizado por el "sectarismo y el rodillo", una política que ha tenido ahora un "algo más que un toque" por parte de los tribunales que "han dejado claro que la libertad está por encima de los partidismos y que el adoctrinamiento no puede vestirse de Decreto". "Marzá y sus ansias poco claras de generar tensiones donde no la había han puesto en riesgo la educación de miles de niños en nuestra provincia", ha señalado.
Al respeto, ha indicado que la gestión educativa en estos dos años se caracteriza por la imposición y el abandono, por lo que ha exigido al Consell que "se ponga las pilas" y realice las actuaciones de ampliación, rehabilitación o construcción de los centros educativos que mayor necesidad tienen como son el de Paterna, Torrente, Xirivella, Benetusser, Catarroja, Gandía, Manises o Burjassot, entre otros muchos.
Así, ha señalado que la "desidia" en materia de educación es solo asimilable a la de Sanidad, donde aún quedan pendientes actuaciones para ampliar el centro de Salud de Burjassot, el centro auxiliar de Alaquàs, Paterna o Quart de Poblet, el centro de Salud de Catarroja o Chiva, el centro de especialidades de Sagunto y "un largo etcétera que le saca los colores a cualquier Consell".
Betoret ha indicado que el Consell "ha pinchado" en temas fundamentales para la provincia como es la despoblación ya que han aprobado un plan "donde no caben todos". Así, ha denunciado que el Plan de Despoblación del Consell "es parcial, ya que selecciona los municipios según el interés de los miembros del Botánic" por lo que ha reclamado que atienda la realidad de todos los municipios valencianos e incluya a Ademuz, Torrebaja y Pobla de San Miguel.
En este sentido, ha indicado que el Consell, para ayudar a los municipios, le exige cumplir tres requisitos "excesivos", sin atender la coyuntura de cada uno de manera que localidades que sufren un gran éxodo de población "se quedan fuera" lo que demuestra que se trata de un plan de "cartón piedra" que "no atiende la sensibilidad de cada municipio".
Por ello, ha solicitado hoy al Consell "más inversiones reales" y "menos titulares" para impulsar las comarcas del interior de la provincia de Valencia, frenar la despoblación y acabar con la "desconexión" digital, económica, y viaria con la ejecución de las carreteras".
