Carles Mulet. EPDACompromís ha presentado una moción en el Senado en la que se insta al Gobierno central a iniciar un mecanismo de colaboración con la Generalitat Valenciana, de acuerdo con el artículo 29 del Decreto ley 20/2020 de 29 de mayo, para la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV). El portavoz de Compromís, Carles Mulet, ha señalado que "el IMV ha de trabajar en conjunción con la Renta Valenciana de Inclusión", por lo que ha propuesto "la transferencia de los fondos para su gestión, con una unificación de itinerarios y de prestaciones".
El sistema de gestión de la Renta Valenciana de Inclusión se halla en pleno funcionamiento. El pasado mes de mayo, en sus diferentes modalidades, llegó a un total de 46.759 beneficiarios y 12.113 personas o unidades de convivencia ha solicitado este ingreso a la espera de resolución. Antes de la irrupción de la pandemia global de la COVID-19, el País Valenciano estaba ya en el camino de la reducción de la pobreza severa, con una reducción de 3,5 puntos porcentuales en 2018.
La crisis económica y social derivada del impacto de la COVID-19 necesita de un refuerzo de las políticas de protección social, ante las graves consecuencias que está teniendo esta en amplias capas de la ciudadanía, y este refuerzo pasa por un fortalecimiento de las políticas y programas que están funcionando, y que están dando resultados exitosos. "La gente está esperando de las administraciones públicas agilidad, coordinación y que se eviten duplicidades en esta materia. El ingreso mínimo vital debe ser una herramienta que aporte soluciones a la gente con la mayor simplicidad posible y posibilite un futuro mejor a los ciudadanos en el que puedan prosperar", ha agregado Mulet. Por eso, ha apelado a la coordinación institucional, el respeto competencial y a la experiencia de la Generalitat con esta renta para llegar a un acuerdo de cogestión que cuente con una adecuada financiación de las necesidades de las personas.
