¿Es la agricultura cosa de hombres? SerÃa importante poner en valor el papel de la mujer en el sector agrÃcola, garantizar su equiparación con los
hombres y reconocer su presencia en sistemas de producción.
Como bien sabemos, desde el inicio de la agricultura, las mujeres han formado parte de esta actividad. Tanto mujeres como hombres tienen un papel fundamental en el medio rural. Aquà ya no hablamos de género, sino de igualdad. Pero todos sabemos que el camino no es fácil.
Lo ideal serÃa que, en las polÃticas de desarrollo rural, las mujeres y los hombres tuvieran papeles protagonistas como un revulsivo al relevo generacional y a la España vaciada. Aunque cada vez hay más presencia femenina en el sector, es minoritaria, por lo que aún queda mucho que hacer en el acceso a la cotización, por ejemplo. Pero no se trata solo de aparecer en papeles, sino de dar un paso adelante, asumir responsabilidades y hacerse más visibles.
El cooperativismo constituye un claro ejemplo de colaboración, para potenciar el desarrollo económico, social y humano de las cooperativas y sus socios. Pero, a pesar de haber experimentado avances en puestos de dirección y gobernanza, la participación de las mujeres en las cooperativas aún es escasa.
DeberÃa haber una mayor participación de las mujeres en los consejos rectores, más explotaciones con titularidad compartida y elementos que fomenten la motivación para que se generen esos cambios. En el cooperativismo, la igualdad de género es consustancial. Sin embargo, las cooperativas han significado una vÃa para el acceso al mundo laboral de un gran número de mujeres.