El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha anunciado que los socialistas van a plantear una campaña en defensa de los municipios porque el PP "quiere acabar con nuestros pueblos", ya que, "quitando servicios públicos, quitando la garantía de salud, lo que están haciendo es desertizar nuestros pueblos". En su opinión, "sin políticas activas para superar los desequilibrios cada vez hay más desequilibrios", por ello, ha lamentado "la política de contrarreforma que está aplicando el PP en muchos ámbitos de ataque a los más débiles". Para Puig, "el coste de la desertización de los municipios es muy elevado" y ha añadido que "el precio que pagaremos los valencianos y valencianas si finalmente se desertiza nuestro territorio será muy alto en patrimonio cultural, en patrimonio natural y en la propia convivencia porque no podemos vivir todos en el 10% del territorio y dejar lo otro abandonado". Por ello, ha anunciado "esta batalla para reforzar el ámbito municipal".
Puig, que se ha referido en la rueda de prensa a los recortes en el servicio del SAMU, ha asegurado que "de lo que estamos hablando es de igualdad, porque el problema que se produce en estos momento es que el PP después de años abandonando los pueblos del interior ahora están intentando liquidar gran parte de nuestros pueblos". A su juicio, "quieren acabar con nuestros pueblos y lo quieren hacer por distintas vías: por la educativa quitando unidades escolares; por la vía de la falta de recursos para incentivar el empleo y también facilitando que no haya oficinas bancarias en los pueblos" y, además, ahora "lo están haciendo también de la forma más cruel con la desatención sanitaria".
Por ello, ha lamentado que "lejos de avanzar en la igualdad de las personas ante la sanidad y lejos de aumentar los servicios para mejorar la asistencia sanitaria a distancia, lo que hacen es quitar las escasas dotaciones que habían". Lo que ha definido como "un ataque al sistema público de salud" y ha añadido que "lo están dinamitando tanto en la Comunitat como en España cuando ha sido un sistema muy positivo que se generó con la ley del 86 que garantizaba la universalización de la sanidad".
Así, ha exigido que "se actúe con transparencia", ya que, "solo tenemos noticias de estos recortes a través de los medios de comunicación porque el responsable socialista de Sanidad en Les Corts, Ignacio Subías, ha preguntado en muchas ocasiones sobre estas medidas y no se ha dado ninguna información al respecto". Ante esto, ha anunciado que los socialistas han presentado una pregunta por el procedimiento de urgencia al conseller de sanidad, Manuel Llombart, para que concrete "dónde van a afectar estos recortes del SAMU y también de las unidades de soporte vital" y para que explique "los motivos y el por qué lo han hecho con nocturnidad y alevosía".
El secretario general del PSPV ha insistido en que los pueblos pequeños, sin ayuntamientos, "hubieran caído en la anemia absoluta" ya que, según ha explicado, han sido "los alcaldes y concejales de todos los partidos los que han estado dando la cara por su pueblos", que muchas veces son ellos los que abren la luz, el agua; en definitiva, ha sostenido Puig, "hacen posible que los pueblos estén vivos". Por ello, ha rechazado esta reforma institucional que "ataca a los pueblos más pequeños" que además no resultará una medida de eficiencia económica sino que "empobrecerá al conjunto de todo el país".
En cuanto a la racionalización del conjunto de las administraciones, ha señalado que ya le ha dicho más veces al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que podría haber utilizado otro sistema más eficaz y eficiente en el uso de los recursos públicos. Así, ha considerado que habría que empezar por la Administración del Estado, como ejemplo, ha señalado eliminar algunas sociedades públicas que están insertadas dentro de la Administración general del Estado. Al respecto, se ha preguntado por qué no hacen una racionalización del Gobierno de España que "tiene muchas cuestiones que podrían ser reducidas y que racionalizarían el uso del gasto público, por que no se actúa frente a lo que ha sido el despilfarro absoluto en algunas comunidades autónomas o diputaciones". Por todo ello, ha insistido en rechazar esta reforma que quita peso político e iniciativa a los ayuntamientos, ya que "va en el sentido contrario de lo que tiene que ser una reforma en profundidad necesaria".
El dirigente socialista ha reiterado que el PSPV apoyará a todos los pueblos y todas las medidas que se hagan en el ámbito local en defensa del interés general al mismo tiempo que ha explicado que "no es sólo esta cuestión sino el conjunto de acciones que se están llevando a cabo contra el mundo local". El PSPV anunciará esta tarde una campana que desarrollará en todos los municipios y pueblos de la Comunitat.
Finalmente, Puig ha hecho hincapié en que el 50% de los municipios valencianos tiene menos de 1.000 habitantes, un total de 214 pueblos en total; así como que 383 municipios tienen menos de 5.000 habitantes para resaltar que "hay que parar esta contrarreforma del PP, que quiere volver al siglo XIX" mientras los socialistas quieren ir al XXI.
Por su parte, el secretario provincial del PSPV-PSOE en Castelló, Francesc Colomer, ha expresado "la máxima preocupación" de los socialistas ante "la pretensión del PP de cambiar la ley para reducir la acción de los ayuntamientos". Además, ha lamentado que esta "contrarreforma ideológica que pretende el PP para acabar con los ayuntamientos tiene más efecto en la provincia de Castelló dada la gran cantidad de entidades locales pequeñas, ya que, el 90% de los municipios de esta provincia tienen menos de 1.000 habitantes". A su juicio, los "criterios mercantilistas que nada tienen que ver con la identidad de la historia, de la eficacia, eficiencia, personalidad y dignidad de las administraciones locales no las tiene en cuenta para nada el PP para enfocar este cambio legislativo". De hecho, ha recordado que los ayuntamientos pequeños han sido ejemplo de buenas prácticas "en eficacia, calidad de vida y servicio para sus vecinos" y ha lamentado que en estas cuestiones la Diputación "ni está ni se le espera".
