Imagen de las instalaciones. FOTO: EPDAVillena es una población situada al noroeste de la provincia de Alicante. Desde hace dos años y durante estas fechas, se celebra un festival internacional, ElCasc, cuyo objetivo es la recuperación del patrimonio artístico del centro histórico de la ciudad. Para ello, un centenar de profesionales de distintas disciplinas relacionadas con el diseño, la arquitectura, la ecología o la rehabilitación, realizan actividades, talleres y encuentros para reactivar los tejidos urbanos y sociales de esta ciudad y revitalizar e integrar el casco histórico de la ciudad de forma participativa y proactiva con los vecinos del barrio.
Los organizadores de esta iniciativa aportan una visión pedagógica de la arquitectura para conseguir que niños, jóvenes y adultos conozcan y hagan suyos los valores del barrio. Unos valores que están ahí pero que muchos desconocen y es a través de actividades lúdicas y la colaboración como logran implicar a los vecinos en las ideas, proyectos y objetivos de mejora y recuperación.
Dentro del amplio programa de actividades, este año se ha realizado una actividad en el exterior del casco antiguo de la ciudad. Con el nombre Territorio Re-Actiu, cerca de un centenar de participantes de este festival han trasladado durante un día el espíritu de ElCasc a Actiu. La empresa alicantina, especializada en la fabricación de mobiliario para espacios de trabajo, comparte los principales valores que mueven esta iniciativa y por ello, han participado como colaboradores en esta edición del festival, mediante la organización de un evento en su Parque Tecnológico y la cesión de material y producto en los talleres de Villena.
Territorio Re-Actiu ha consistido en un taller de rediseño de mobiliario a través de materiales como cajas de cartón, asientos de sillas, palés, mesas o butacas de auditorio, creando nuevas funcionalidades para piezas que tenían un uso muy diferente en su origen. Precisamente uno de los objetivos de la jornada, a la que han asistido cerca de un centenar de personas entre tutores, participantes de El Casc y vecinos del casco antiguo de Villena, era mostrar como casi todos los objetos pueden tener una segunda vida, incluso una tercera con un poco de imaginación y creatividad.
A lo largo de una mañana de intensa actividad, los diferentes estudios de arquitectura que encabezan los talleres de ElCasc han construido, con materiales y producto Actiu, un pabellón donde se ha disputado un torneo de tenis de mesa. Cada estudio se ha encargado de desarrollar una parte de este pabellón, dependiendo de su especialidad o perfil profesional. La distribución del espacio ha estado a cargo de Grupo Aranea; la escenografía ha sido ejecutada de forma conjunta por los estudios Senyor Mixuro y Arae las gradas para jurado y espectadores, son obra de Pez Estudio y La Gres y el desarrollo del juego, en medio de un ambiente completamente festivo, ha sido realizado
La reutilización, la conservación, el aprovechamiento y ahorro energético, la sostenibilidad, el respeto por el entorno y las personas que lo habitan como base de la recuperación urbana y arquitectónica son los argumentos que trabaja ElCasc y que además forman parte de la esencia de Actiu. Y así lo han reseñado algunos de los estudios participantes tras su paso por Actiu. "El hecho de quedarse y crecer dentro de su territorio, implicando además a terceros ya es un logro para una industria", ha dicho
Soledat Berbegal, responsable del departamento de Comunicación y Marketing, ha manifestado la satisfacción de Actiu por tener la oportunidad, una vez más, de apoyar iniciativas de estas características "con las que nos sentimos tan identificados". En esta jornada han participado también un grupo de niños del casco histórico de Villena, hijos de los tutores y organizadores y de los trabajadores de Actiu. "Hemos tenido la ocasión de crear un espacio lúdico-deportivo dentro de un espacio de trabajo. El mundo de la industria se ha mezclado con la formación, las necesidades sociales, la creatividad y la arquitectura. Pensamos que los resultados de estos encuentros son altamente positivos" ha concluido Berbegal.
Un taller que ha mostrado que con creatividad, imaginación y materiales reciclados, los objetos más cotidianos pueden tener una nueva vida con usos de lo más sorprendentes.
