El profesor José Andrés Torrent, de la Escola Tècnica Superior d'Enginyeria Agronòmica i del
Medi Natural
(
ETSEAMN
), perteneciente a la
Universitat Politècnica de València
(UPV), considera que el fuego es el cáncer de los montes y que deben tomarse medidas urgentes para acabar con los incendios que cada año asolan los bosques de la
Comunidad Valenciana.
José Andrés Torrent es profesor del Grado de IngenierÃa Forestal y del Medio Natural de la ETSEAMN, donde imparte la asignatura "Prevención y Extinción de
Incendios Forestales
". En su opinión, "los montes de la Comunidad Valenciana son destruidos cada año por los incendios porque los bosques, hoy en dÃa, ya no están equilibrados, al haber sido alterados por la mano del hombre. Esto provoca que cada incendio pueda arrasar miles de hectáreas. Además, la selvicultura preventiva es carÃsima y no se invierte ni en las zonas protegidas o se invierte muy poco".
Otro factor clave a tener en cuenta, según explica Torrent, "es que del orden del 90-95% de los incendios no son provocados por causas naturales, como los rayos, sino que tienen origen humano. En realidad, los incendios naturales en montes en equilibrio ecológico, forman parte de la evolución de los mismos y en ocasiones pueden ser hasta positivos, creando ecotonos e incrementando la biodiversidad. Pero actualmente esas circunstancias no existen en nuestros montes, y los incendios provocados por la mano del hombre destruyen los ecositemas y nos empobrecen a todos".
Además, la sociedad no es suficientemente consciente de los gravÃsimos daños reales que causa un incendio como la erosión de los suelos, la destrucción de hábitats tanto de fauna como de flora, la alteración del ciclo hidrológico, el inicio de procesos generalizados de desertificación, la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera, los altos gastos de extinción, las pérdidas económicas directas e indirectas, y la pérdida de valores paisajÃsticos.
Ante este panorama, el profesor considera de vital importancia tomar medidas urgentes para evitar los incendios y los graves problemas que causan. "DeberÃa ser prioritario crear empleo en el sector forestal e impulsar iniciativas empresariales en las zonas forestales. Hay muchas iniciativas que se pueden llevar a cabo para que los jóvenes vuelvan a vivir en los pueblos, como producir plantas medicinales, aromáticas, culinarias, semillas, recuperar especies, crÃa de caracoles, de especies cinegéticas, gestionar biomasa, la agricultura de montaña, la ganaderÃa rústica, recuperando razas autóctonas, el turismo rural, silvoturismo, deportes de naturaleza, etc… ordenar correctamente e investigar en estos aspectos es fundamental y nos jugamos el futuro de nuestros montes y bosques", explica Torrent.
El profesor asegura que muchos de sus alumnos, al acabar los estudios, deben emigrar a otros paÃses o ingresar en las listas del paro, "cuando se irÃan encantados a vivir a los pueblos que hay semi-abandonados en las zonas forestales del interior, donde en breve tiempo se quedarán los pueblos completamente vacÃos. Esto serÃa posible, si hubiera iniciativas de empleo. Con ello, conseguirÃamos no sólo reducir la cantidad de incendios, sino que el sector forestal contribuirÃa a reducir la plaga y gran injusticia del paro juvenil, los montes estarÃan cuidados, serÃan productivos y podrÃan reequilibrarse".
Otra de las medidas que recomienda el profesor para que los incendios no sean tan virulentos es la reinserción de animales salvajes o razas rústicas en estado de semilibertad como caballos, cabras montesas, corzos o ciervos, etc. "Esta medida deberÃa llevarse a cabo mediante una buena gestión para que se llegue a un equilibrio, pero los animales mantendrÃan los montes limpios", asegura Torrent.
Y por supuesto, un factor fundamental es la concienciación social. Torrent manifiesta que "es necesaria una filosofÃa de gestión por parte de los polÃticos que entiendan qué son los bosques, para que los incendios desaparezcan. Y la sociedad debe entender los graves problemas que ocasiona un incendio y que van más allá de un paisaje arruinado".