Una de las canciones más dulces de Paul McCartney -tanto que es susceptible de que Compromís le ponga un impuesto por azúcar añadido- es Here, There & Everywhere. La interpretaron en su día los Beatles, y que yo sepa en ningún concierto de sus dos últimas giras en solitario la ha cantado el genial Macca. Yo conocí esa canción en una versión orquestal de las que ponían en el Hilo Musical de las salas de espera de los dentistas. Debía estar firmada por Ray Connif, Paul Muriat o alguno de ese tipo de directores de orquesta. Lo único que los coristas decían con letra (porque lo demás eran uuuuuuus o aaaaaaaas) era el título de la canción, que yo había leído en alguna revista sobre el grupo de Liverpool, aunque nunca hasta ese día había oído la melodía de esa composición. Entonces no era tan fácil como ahora acceder a la música, a no ser que compraras el disco. Atando cabos, deduje que por fin había dado con esa pieza, aunque no precisamente en una grabación de sus primeros intérpretes. Esa versión instrumental me va a valer mejor para mis propósitos que la del grupo más importante de la música moderna. Porque no necesito más que esas tres palabras de la letra de la canción para contarles lo que quiero decirles en este momento. Que es que el periodismo es un gran oficio que nos permite a los privilegiados que lo ejercemos un impagable contacto con ustedes, los que nos lee, escuchan o ven en cualquiera de los medios en los que, casi siempre con mucha modestia, intentamos ganarnos la vida honradamente. Desde hace unas pocas semanas yo ya no estoy Aquí, en el Periódico. Mi reto está ahora mismo en dirigir los informativos de la única cadena autonómica de televisión privada de la Comunidad Valenciana, y en conseguir que el favor que ustedes me han brindado Aquí, mientras he sido el delegado del grupo en Valencia, me acompañe en este nuevo y apasionante reto. Una parte de mi corazón y de mis ideas va a seguir ocupando un huequito en estas páginas hasta que mi admirado Pere Valenciano y mi magnífico sucesor Dani Navarro lo consientan. Porque yo quiero seguir contándoles cosas... Aquí, Allí, y en Cualquier Lugar.