El consumo de la sandÃa se asocia normalmente al calor y a pesar de las
elevadas temperaturas tanto aquà como en el resto de Europa lo cierto es que el
mercado no tira. En este sentido LA UNIÓ de Llauradors denuncia un hundimiento
de los precios en el campo y en algunas zonas como el Camp de Túria o l'Horta
se cotiza de media a una cifra ridÃcula de 0,07 euros/kg.
Eso en el mejor de los casos para la negra o la blanca
que no tiene pepitas, en el caso de la negra con pepitas ni siquiera tiene
cotización y se deja en el campo sin recolectar. El melón no va mucho mejor y
los precios en origen se sitúan de media en 0,12 euros/kg.
Tampoco la patata, ni la blanca ni la roja, va mucho
mejor pues en la zona productora del Camp de Túria no pasa tampoco de los 0,08
euros/kg y buena parte de la cosecha se está pudriendo por efecto del calor
quedando inservible comercialmente. Y la cebolla tres cuartos de lo mismo.
Tanto la patata como la cebolla tenÃan unas cotizaciones decentes hace un par
de semanas pero se han hundido con el paso de los dÃas.
Pepe Serra, productor de hortalizas y secretario comarcal
de LA UNIÓ en Camp de Túria, señala que "con estos precios y la alarmante falta
de rentabilidad es difÃcil que haya relevo generacional en el campo y no es de
extrañar que un tercio de tierra cultivada haya desaparecido por ejemplo en el
Camp de Túria en el transcurso de los últimos veinte años".
Son además cultivos que no tienen ni siquiera ayudas por
parte de la Unión Europea como sà sucede con otros como es el caso de los
cÃtricos. Los productores de hortalizas deben sobrevivir en estos momentos,
como es el caso de los de sandÃa, con la cantidad irrisoria de 7 céntimos por
kilo de su producto.