El Gobierno, a través de la Dirección General de Tráfico, iniciará el traslado de los vehÃculos afectados por la dana de octubre que se encuentran almacenados en la Zona de Actividades LogÃsticas (ZAL) del puerto de Valencia para su destrucción y descontaminación conforme a criterios ambientales.
Asà lo recoge una resolución del director general de Tráfico, Pere Navarro, publicada este sábado en el BoletÃn Oficial del Estado (BOE), por la que se regula la retirada y el tratamiento de los vehÃculos afectados por daños causados por la dana.
El documento recuerda que entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre de 2024, España sufrió la peor dana en lo que va de siglo en diversas comunidades autónomas, entre las que resultó particularmente afectada la Comunitat Valenciana, con consecuencias especialmente graves y trágicas en la provincia de Valencia.
Perjuicio económico y medio ambiental
La catástrofe dejó 228 muertos y decenas de miles de damnificados, asà como multitud de vehÃculos arrasados, que quedaron amontonados en las vÃas públicas, y cuya recogida y gestión de residuos fue declarada "servicio esencial".
Muchos de ellos se encuentran en estos momentos almacenados en diversas zonas habilitadas en la Zona de Actividades LogÃsticas (ZAL) del puerto de Valencia, pero, según la resolución, "se hace imperativo ordenar su retirada habida cuenta del perjuicio económico y medioambiental que representan".
Por ello, con el fin de dar eficaz respuesta a la necesidad de ordenar el traslado de estos vehÃculos a los centros autorizados de tratamiento (CAT) para su descontaminación, se dicta esta resolución, que establece el procedimiento de gestión y orden de retirada de los vehÃculos dañados.
La resolución, que tendrá efectos a partir de este domingo, afecta exclusivamente a los aquellos vehÃculos afectados por la dana que hubieran sido retirados, por orden del Ministerio del Interior, de las vÃas interurbanas y travesÃas y que se encuentran almacenados en la ZAL del puerto de Valencia.
El procedimiento incluye la identificación y localización de los vehÃculos afectados y la retirada y tratamiento por parte de la Dirección General de Tráfico, que gestionará y dará orden de traslado a un CAT para su destrucción y descontaminación conforme a criterios ambientales.