Con la llegada del verano se incrementa el número de consultas por hiperhidrosis, ya que un 5% de la población sufre esta patología, que padecen tanto hombres como mujeres y está caracterizada por una sudoración excesiva que supera las necesidades normales de regulación térmica del cuerpo. Según las regiones afectadas por el exceso de transpiración, se distinguen: sudoración palmar, sudoración plantar, sudoración axilar y sudoración facial.
La hiperhidrosis palmar primaria es un problema relativamente frecuente, y que puede condicionar la vida de la persona que lo padece. Esta condición, interfiere en la vida del paciente con actividades cotidianas, relaciones sociales y el bienestar psicológico "en algunas ocasiones, por ejemplo, hemos tenido que intervenir a pacientes jóvenes, de dieciséis años por que la hiperhidrosis le limitaba en los estudios y tenía que realizar todos los exámenes oralmente", comenta el Dr. José Marcelo Galbis, médico especialista en cirugía torácica y añade que "en estos casos, si el tratamiento farmacológico no funciona, la única solución es la cirugía".
Cuando acudir al médico
El principal síntoma de la hipersudoración es el mal olor corporal. Además, el paciente puede presentar otros síntomas tales como sudoración localizada en manos, pies, axilas, cara o frente; piel constantemente húmeda, lo que provoca en algunos casos infecciones cutáneas recurrentes como los hogos o la dermatitis, principalmente.
El diagnóstico consiste en recopilar información del paciente, sobre cuándo, cómo y cuánto dura la sudoración, si existen antecedentes familiares, cuáles son las zonas afectadas, "realizamos un análisis de sangre que confirme si la función tiroidea o los niveles de glucosa en sangre son anormales y determinar aquellos casos donde la hiperhidrosis está provocada por la hiperactividad del tiroides o una baja concentración de glucosa en sangre" añade el Dr. Galbis.
Una solución irreversible
En los casos más graves de hiperhidrosis, el especialista practica una técnica quirúrgica mínimamente invasiva en el Hospital Vithas Castellón, que es la simpatectomía torácica. Un tratamiento efectivo y duradero que ofrece una solución definitiva a diferencia de otros tratamientos que requieren repetición. La simpatectomía es una operación que se realiza bajo anestesia general y que secciona algunos de los ganglios de la cadena del sistema simpático, ubicados en el interior del tórax, en paralelo a la columna vertebral, para dar solución a la hiperhidrosis o sudoración excesiva de cara, manos y axilas.
El Dr. Galbis explica que "consiste en introducir una óptica en la cavidad torácica a través de una pequeña incisión entre dos costillas a nivel axilar, una vez dentro, se identifica la cadena nerviosa simpática, que discurre sobre la cara interna de las costillas, y se secciona con electrocoagulación, a la altura del 2º ganglio simpático. De ahí es de donde parten los nervios que estimulan las glándulas sudoríparas de las manos, por lo que al desaparecer el estímulo desaparece el sudor. Se repite el mismo procedimiento en el lado contralateral".
La intervención dura menos de 15 minutos y conlleva una estancia hospitalaria de 24 horas en la mayoría de los casos. El dolor postoperatorio es leve y se maneja con analgésicos habituales, pudiendo recuperarse la vida normal en unos días. Los resultados son excelentes, especialmente en el caso de las palmas de las manos y muy buenos en el caso de las axilas.
