Imagen de la fachada de la casa de la calle Armengol en Sagunto. EPDA Los
vecinos del casco histórico de Sagunto han vuelto a presenciar este
fin de semana el derrumbe de otra casa de la calle Armengol, ubicada
justo al lado del inmueble que ya se derrumbó hace pocas semanas.
Por suerte, los cascotes cayeron en la zona delimitada por las vallas
que todavía permanecen tras el primer suceso y no hubo que lamentar
ningún herido.
No obstante, los
vecinos y las vecinas de la zona han mostrado su malestar ante lo
ocurrido y exigen al Ayuntamiento de Sagunto un plan de actuación
para sanear las casas que se encuentran en malas condiciones.
Por su parte, el
Grupo Municipal Socialista exige una respuesta seria y definitiva en
relación al nuevo derrumbe de Ciutat Vella. Según la concejala
socialista Natalia Antonino, “resulta increíble que, después de
los trabajos realizados, a 20 días de derrumbarse la vivienda
reiteradamente denunciado por su estado de abandono en la calle
Capellà Pallarés, próxima a la calle Armengol, en Ciutat Vella,
vuelva a producirse un hecho similar al desmoronarse parte de la
vivienda de la esquina, quedando el resto de las estructura en un
estado absolutamente endeble”.
“Aquí
no se trata de sacar rentabilidad política de un hecho que podemos
calificar de insólito, despues de haber denunciado los vecinos en
reiteradas ocasiones, nuestro Grupo Municipal por medio de la prensa
en primer lugar, denominando el lugar como“La
esquina del abandono”,
aquí es un problema de funcionamiento del Ayuntamiento, comenzando
por Castelló, concejales delegados correspondientes y los técnicos
que tienen que evaluar el riesgo de estas viviendas. Alguien tendrá
que responder seriamente y de forma definitiva y tomarse las medidas
que correspondan ante este nuevo derrumbe. Y como no fuera ese un
hecho grave, la zona fue vallada y no se trabajó, como debería
haberse hecho, ni sábado ni domingo, demoliendo zonas que con un
poco de viento, lluvia o cualquier incidente podría venirse abajo
también espontáneamente. Lo reclamaron a gritos los vecinos el
viernes. Nadie los escuchó. Y allí quedó todo el fin de semana la
vivienda como un castillo de naipes a la intemperie. Una
irresponsabilidad.”, sostiene Antonino.
Según Antonino,
“nos costa que la Policía Local, realizando un recorrido de
rutina, el mismo viernes por la mañana pasó por el lugar y consultó
a los trabajadores sobre la estabilidad de las paredes que quedaban a
la vista, que a simple vista y por sentido común, se venía abajo en
cualquier momento. Unas 6 horas más tarde y por milagro, nuevamente,
sin desgracias personales, la mitad de la casa se desplomó. Esto no
puede quedar como una anécdota de la incapacidad de gestión que
estamos viviendo en nuestra ciudad. Esto tiene que derivar en
responsabilidades concretas, pues por eso son empleados del
Ayuntamiento para que los habitantes estemos tranquilos que se ocupan
y preocupan con seriedad y profesionalidad del área que les
corresponde. A eso tiene que dar respuesta Castelló y los concejales
delegados o quién corresponda. Es una obligación ante los
ciudadanos y las ciudadanas”.
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