Las fiestas patronales
de Rafelbunyol llegaron ayer a su término con la celebración del día grande de la localidad.
Tras 9 días de festejos populares, el
pasado domingo daban comienzo las fiestas religiosas, tres días de fervor y
fiesta en honor a la patrona y patronos del municipio: la Verge del Miracle y
los Santos de la Piedra. Ayer, los vecinos de Rafelbunyol rendían
homenaje a la Mare de Dèu del Miracle, en el día que se celebra su festividad.
La localidad se engalanaba para acudir a
los actos en honor su patrona, sobre todo para la
procesión que tuvo lugar a las 20 horas.
Los clavarios y clavariesas mayores presidieron
la procesión para venerar a la
Mare de Déu del Miracle, una romería en la que participaron
miles de vecinos y que concluyó con un castillo de fuegos artificiales.
Por la mañana, el municipio recibía la
visita del Cardenal Arzobispo Emérito, Ricard María Carles i Gordó, que fue recibido
por las autoridades municipales en la puerta del Consistorio. Una vez allí,
dejó constancia de su paso por el municipio, firmando en el libro de honor del
Ayuntamiento.
Posteriormente, acudieron a la Iglesia,
donde ofició misa solemne que fue cantada por la Coral Cantarella de
Rafelbunyol.
Una intensa jornada que ponía punto y final a 12 días, en los que la vecindad ha disfrutado
enormemente de sus fiestas patronales y populares.
Diversión, seguridad y altas cuotas de participación
han sido las características principales de estas fiestas como queda patente en
los miles de vecinos que participaron en las paellas, los cerca de 900 niños
que asistieron a la nit del farolet o las más de 15.000 personas que
disfrutaron de la noche de disfraces.
Los Clavarios Mayores junto al cardenal Ricard María Carles. Foto: EPDA
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