Estudiantes en un examen. EPDA 11.000 personas han sido convocados este sábado, 31 de octubre, por la Junta Qualificadora de Coneixements de Valencià, para realizar la prueba extraordinaria del nivel C1 de valenciano, el anterior Mitjà. La cita, que supone tres partes del examen, se realiza a pesar de la situación sanitaria y de encontrarse el país en pleno estado de alarma.
En concreto, la prueba servirá para la valoración del área de comprensión escrita, el área de estructuras lingüísticas y el área de expresión e interacción escritas, siendo la última parte del examen el próximo 28 de noviembre, a la que asisitirán solo los aprobados.
De esta manera, la Generalitat ha habilitado espacios para esta convocatoria en los municipios de Alicante, Alcoy, Alzira, Buñol, Castellón de la Plana, Elche, Gandia, Llíria, Ontinyent, Orihuela, Sagunto, Torrent, València, Vinaròs y Xàtiva.
En esta línea, la administración ha preparado excepcionalmente dotaciones amplias como es el caso de Feria València, en la capital, con el objetivo de ampliar las medidas de seguridad ante la situación sanitaria debido a la covid-19. Sin embargo, en la mayoría de municipios se mantienen las pruebas en centros de secundaria y aulas universitarias.
Aunque en las convocatorias la JQCV ha señalado las entradas y salidas correspondientes de los espacios de examen para que no se produzcan aglomeraciones de personas, algunos estudiantes han mostrado a este diario su preocupación por el mantenimiento de las fechas de las pruebas, tras el elevado aumento de contagios en la Comunitat Valenciana en los últimos días, donde se han superado los récords desde el inicio de la pandemia en marzo.
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