La CHJ destina otros 87 millones a obras de emergencia para reparar daños por la dana

La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) invertirá cerca de 87 millones de euros en nuevas obras de emergencia para reparar los daños de elevada magnitud en el dominio público hidráulico e infraestructuras ocasionados por las inundaciones producidas por la dana de octubre.

 Se contemplan actuaciones en el tramo bajo del río Turia, en la cuenca del río Magro, en la provincia de Castellón y Teruel y en las márgenes del barranco del Poyo desde cabecera hasta Picanya, según han informado este miércoles fuentes de la CHJ.

Además, se han aprobado otras dos obras de emergencia destinadas a la reposición de la toma desde el bombeo de la comunidad de regantes de Montserrat y a realizar el seguimiento de la calidad de las aguas continentales para evaluar la afección causada por las avenidas de agua extraordinarias.

Está previsto que estas actuaciones se inicien durante las próximas semanas y se sumarán a las seis obras de emergencia que ya se están desarrollando, así como al resto de trabajos de mantenimiento y conservación de cauces que el Organismo viene realizando desde la primera semana de noviembre.

Con esta nueva partida, la Confederación ha destinado cerca de 190 millones de euros en obras de emergencia para la reconstrucción tanto del dominio público hidráulico como de las infraestructuras hídricas afectadas.

Para la reconstrucción del dominio público hidráulico en las zonas afectadas por el desbordamiento del río Magro se destinarán 44 millones de euros y los trabajos se llevarán a cabo en municipios como Utiel, Requena, Buñol, Yátova, Macastre, Alborache, Turís o Montroy.

Los trabajos consistirán en la retirada de residuos e infraestructuras caídas sobre el cauce y en la reparación o reconstrucción de daños en motas de protección, así como en el refuerzo de los taludes en barrancos dañados, con el fin de aumentar el resguardo frente a posibles avenidas futuras.

La segunda fase de los trabajos de reparación de los márgenes del barranco del Poyo supondrá una inversión de 20 millones de euros y comprende los cauces desde la cabecera hasta Picanya, completando así la primera fase de los trabajos iniciada hace unas semanas, desarrollada en el tramo desde Picanya hasta la desembocadura, también por valor de 20 millones.

La reparación de daños en el barranco del Poyo se llevará a cabo principalmente en Chiva y Torrent, mientras que la reparación de daños en los barrancos de Horteta, Gallego y otros barrancos menores tributarios de l’Albufera se desarrollará en Aldaia, Alaquàs, Quart de Poblet, Ribarroja, Loriguilla y Cheste.

Las actuaciones se centrarán en la retirada de residuos, en el refuerzo de las márgenes que han sufrido un descalce y en la reparación o reconstrucción de daños en márgenes, y se contempla el recrecido de determinados tramos de motas para aumentar el resguardo frente a posibles avenidas.

En el tramo bajo del río Turia, se invertirán 16,6 millones de euros para actuaciones desde aguas arriba de la presa de Buseo hasta la desembocadura, incluyendo los afluentes del mismo, y consisten en la retirada de restos de infraestructuras arrasadas por la avenida ubicados en el cauce, en la reparación y el refuerzo de las márgenes afectadas, y en la reordenación de las gravas para eliminar socavones.

Además, se van a emprender trabajos para recuperar con especies autóctonas el bosque de ribera que se ha visto arrasado por la dana, así como las zonas de baño y las áreas recreativas, y también está prevista la recuperación de la continuidad de la senda del Parque Fluvial.

Por otra parte, se destinarán 3 millones de euros a actuaciones de reparación y acondicionamiento del dominio público hidráulico en las provincias de Castellón y Teruel, entre las que se incluye la retirada de arrastres y la recuperación de las zonas de recreo en Montanejos, Cirat, Arañuel, Les Coves de Vinromà, La Salzadella, Sant Mateu o Tirig.

También se invertirán otros 3 millones de euros para restablecer el suministro a la Comunidad de Regantes de Montserrat y 280.000 euros para un seguimiento intensivo de la calidad de las aguas continentales en la zona afectada por la dana, especialmente en l’Albufera.