Luis García, presidente de Asecam. FOTO EPDA Luis García es el presidente de la Asociación de Empresarios del Camp de Morvedre (Asecam), que se marca como objetivo incorporar a autónomos y pymes. García se muestra especialmente crítico con los bancos, por haber cerrado el grifo crediticio, y aboga por impulsar los polígonos industriales y el turismo para crear empleo en la comarca.
-¿Cuáles son los próximos retos de Asecam?
-Vamos a integrar a autónomos y microempresas, a los que podemos ofrecer formación y facilitar el acceso a microcréditos que ya tiene aprobados CEPYMEV con 15 entidades bancarias. Esta iniciativa la vamos a presentar próximamente en el Centro Cívico. Queremos que se unan las empresas pequeñas, como bares, restaurantes, autónomos y microempresas, que se encuentran desasistidas y no cuentan con el apoyo de otras entidades mayores. Hay que recordar que Asecam es la única asociación válida para intermediar con el Ayuntamiento cuando surgen conflictos, por ejemplo con la apertura de nuevos negocios, problemas con los vecinos, etcétera. Asecam tiene asesoramiento legal. También ofrecemos la opción de dejar nuestra sede a asociaciones de ámbito empresarial y comercial para acoger eventos y actos.
-¿En qué momento se encuentra Asecam?
-Estamos en una situación crítica por la reducción de asociados con motivo de la crisis y el cierre de empresas. Esta bajada supone también una disminución de ingresos, con lo cual en estos momentos las acciones que hacemos son sin dinero o con el apoyo de los asociados.
-¿Qué opinión le merece la parálisis del Ayuntamiento de Sagunto al no tener aprobadas sus cuentas?
-Vista la situación que tenemos en el Ayuntamiento, sin una mayoría suficiente para sacar adelante tanto el presupuesto, como proyectos que pudieran acelerar el desarrollo económico en tiempos de crisis, vemos que todos los grupos políticos tienen más interés en defender su electorado que en arrimar el hombro y sacar adelante el municipio, que debería ser la principal preocupación de un político local. Bajo ningún concepto hablo de que se apoye al equipo del PP, sino que haya una mayoría suficiente, sea en torno al PP u otro partido, porque lo importante es sacar adelante el municipio en estos momentos de crisis tan profunda.
-¿Qué valoración hace de la situación económica actual y cuáles son los principales retos de las empresas?
-Somos una comarca eminentemente industrial. Visto que la industria a nivel nacional está parada, lo importante es mantener en estos momentos las empresas y sus puestos de trabajo. Las únicas opciones que tenemos de poder desarrollar proyectos a corto y medio plazo, que puedan incrementar los puestos de trabajo de la comarca, son dos. La primera, a nivel industrial, desarrollar los polígonos industriales con las características que ahora se requieren y no como se planificaron -entonces se planificó un Parc Sagunt con macroempresas y macroparcelas-. La realidad ahora es otra, al no existir el cliente de la macroparcela, sino que existe el cliente de la nave mediana o pequeña, alquilada mejor que comprada, con servicios integrados en el puerto industrial, lo que sería una zona franca donde poder importar y exportar, pagando impuestos sólo cuando las operaciones estén hechas.
-¿Y la segunda?
-El desarrollo de planes para el incremento del negocio turístico, con un turismo todo el año, de consumo, que incluya actividades que atraigan un turismo diferente, como el deportivo, por ejemplo. Tenemos una industria turística cuya base es magnífica, pero que no conseguimos desarrollar lo suficiente para que los negocios lo noten.
-¿A qué cree que se debe?
-Tenemos tanto en Puerto de Sagunto, como en Corinto y Almardà, unas playas magníficas, igual que en Canet, pero no están dotadas de los servicios que exigen los touroperadores para traer grupos que pudieran dar una economía sostenible a ambos municipios durante el periodo invernal.
-Una de las principales críticas que le he leído va dirigida a los bancos.
-Hay una gran indignación entre los pequeños empresarios ante la injusticia que se está cometiendo de dar dinero a los bancos y éstos, en lugar de dar a la sociedad, están limpiando sus vergüenzas y nos están dejando en la más absoluta ruina. ¿Cómo se puede entender que teniendo barra libre del BCE al 1% los bancos en lugar no están dando crédito y en segundo los que están dando, que casi todo son renegociaciones, están a un interés nunca por debajo del 5%, siendo imposible obtener créditos personales por debajo del 8%? Es una injusticia que una clase empresarial que ha costado tantos años de crear, casi siempre de carácter familiar, se la estén cargando en sólo dos años y tardará mucho tiempo en reconstruirse.
-¿Se puede luchar contra los bancos?
-El Estado debería poner dinero en entidades no bancarias que prestaran a estas pymes durante el tiempo necesario para salir de la crisis. El empresario no necesita financiación, sino liquidez para hacer frente a los pagos de un sector bancario sin ningún tipo de moral y al que no le importa la situación de los empresarios, ni la de los trabajadores y proveedores. Los bancos están para responder a sus accionistas y ser lo más rentables posible, pero se equivocan al entender que defender una posición desde el punto de vista económico de inflexibilidad ante la sociedad, pymes y asalariados, le va a salir gratis como siempre. Creo que muchos empresarios, entre los que me incluyo, hemos recibido la señal y vamos a intentar desde nuestra posición que el banco gane lo justo con nosotros.
-¿A qué se refiere?
-Los bancos generan sus beneficios con la prestación de servicios, sea transferencias, abonos, cargos o domiciliaciones y, por otra parte, con la concesión de créditos, estudios de viabilidad, etcétera. Si cada uno de nosotros volviera a lo que antiguamente hacían nuestros padres, pagar cuando tenemos y si podemos, pagar en metálico, en vez de usar las tarjetas de crédito, talones o transferencias, entonces los bancos notarían en sus carnes lo que es el descenso brutal de ingresos por estos conceptos. Esa actitud que ahora notamos de desprecio en las entidades bancarias de gente que hace tres años nos ponía la alfombra roja, no tiene sentido que le salga gratis. Esta actitud, siempre pacífica, les hace mucho más daño que cualquier actitud reivindicativa o de protesta, que no influye en las tomas de decisiones de los directivos de la banca.
-¿Deben las empresas mirar más al extranjero?
-Si hay algo que se ha aprendido de esta crisis es que mirarse al ombligo no lleva a ningún sitio. La empresa que hace cinco años pensó que su desarrollo dependía del mercado interior y exterior, en estos momentos está capeando la crisis de una manera diferente y está preparándose para lo que tiene que llegar en los próximos años. Por el contrario, la empresa que ha basado su desarrollo en el consumo interno está, o cerrada, o arruinada, o en proceso de ello.
-¿Cuál es la situación de las pymes en la comarca?
-Las empresas familiares que han sido el motor en la comarca en los últimos 20 años, están pasando grandes dificultades para mantenerse abiertas. No hablo de empresas clásicas sin movimiento, sino de emprsas donde las segundas generaciones han modernizado y adaptado las empresas iniciales a los tiempos modernos, pero con la crisis, la falta de pago de las administraciones y el desaplazamiento de la actividad económica de España a otras regiones más baratas o más productivas, no han podido aguantar el tirón.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia