El president de la Generalitat, Ximo Puig. EFE/Archivo El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha reprochado este jueves que dirigentes del PP digan que quieren eliminar el impuesto sobre las hipotecas, cuando lo que hicieron en la Comunitat Valenciana fue triplicarlo, por lo que ha pedido que no hagan "demagogia", sobre todo a quienes han gobernado.
Puig ha indicado en declaraciones a los medios de comunicación que el Gobierno de España ha reaccionado "de una manera adecuada" a la sentencia del Tribunal Supremo sobre el impuesto de actos jurídicos documentados, que ha generado "mucha inseguridad" y una "indignación" que comprende.
El president ha aplaudido que el Ejecutivo central haya optado por intervenir ante la "desazón ciudadana" que se ha generado, con la aprobación de un real decreto ley del que habrá que "leer la letra pequeña", aunque en cualquier caso ve una "iniciativa positiva" que las entidades bancarias paguen finalmente el impuesto.
En su opinión, con la cuestión fiscal no hay que hacer "demagogia", pues este es un impuesto que "tenía su lógica en su momento" y hay que analizar si en la actualidad la tiene, dentro de una política fiscal progresiva y que hay que revisar.
"Lo que no se puede es actuar a base de impulsos, y de impulsos poco reflexivos", ha aseverado Puig, quien ha opinado que lo que corresponde en este momento es que los bancos "asuman su responsabilidad en este impuesto" y que de cara al futuro se haga una reflexión "en profundidad" sobre la fiscalidad "en todos los aspectos".
El president también ha abogado por una "unidad de mercado en la fiscalidad" y por que en los impuestos cedidos a las comunidades autónomas se puedan ceder otros "más generales", así como buscar que no haya "dumping fiscal, como existe en estos momentos en España".
Puig ha afirmado que la Generalitat no se plantea en este momento quitar ese impuesto, sino que hay que esperar a conocer el real decreto, y ha afirmado que "por razones de responsabilidad pura y dura", la Comunitat no está en disposición de un "desarme fiscal".
"La peor fiscalidad es aquella que produjo el PP para las generaciones que no están gastando", ha afirmado el president en referencia a los 46.000 millones de euros que debe la Comunitat y que constituyen a su juicio "el impuesto a las futuras generaciones", que es "el peor impuesto, el impuesto irresponsable".
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