El pleno del
Ayuntamiento de Sagunto ha rechazado el paso de residuos nucleares
por el municipio después de que el Ministerio de Industria anunciara
la ruta de estos desechos de las centrales de Ascó I, Ascó II y
Vandellós e incluyera a la localidad. Concretamente, según explicó
la edila de Compromís Teresa García, los camiones cargados con
estos residuos pasarán tres veces al mes por la AP-7, cerca del
núcleo urbano del Pla del Bou, durante 20 años.
Los partidos de
la oposición (PSPV, Compromís, Iniciativa Porteña y Esquerra
Unida) apoyaron la moción de Compromís, que tuvo que incluir una
enmienda de adición para que la propuesta fuera válida. Y es que
según matizó el secretario municipal, la competencia de la
circulación de las carreteras autonómicas y estatales “no es
municipal, sino de la Generalitat o del Gobierno de España”. En
este sentido, la propuesta incluyó instar a la autoridad competente
a declarar Sagunto municipio libre de paso de residuos nucleares y
prohibir expresamente el paso de ningún convoy que traslade este
tipo de residuos.
Además, el pleno
instó a las autoridades competentes a desistir del desarrollo de un
sistema de almacenaje temporal centralizado de residuos nucleares,
por “la peligrosidad y la vulnerabilidad que estos provocan durante
su traslado”. Según la moción, desde las centrales se trasladarán
1.421 elementos combustibles. Estos residuos se corresponden con el
material Uranio-238 que se transforma en Uranio-235, una vez que se
somete al proceso de fisión que desprende la energía suficiente a
los reactores nucleares para producir energía eléctrica.
El uranio 238 es
un material de alta actividad radioactiva, lo que significa que tiene
un período de semidesintegración superior a los 30 años. Así
mismo, los niveles de radioactividad que emite son altamente
perjudiciales para la salud y el medio ambiente.
El
edil de Actividades del equipo de gobierno, Paco Villar, destacó que
según el estudio que se ha realizado sobre la ruta “la posibilidad
de fuga de uno de los contenedores es una de entre mil millones” y
defendió las medidas de seguridad que se llevarán a cabo para la
circulación de los camiones con los residuos nucleares. “Los
contenedores resisten una caída de nueve metros y soportan una
exposición al calor de 800 grads en 30 minutos”, informó Villar.
Por ello, propuso que el tema se quedara sobre la mesa para tratarlo
en las comisiones oportunas o unas enmiendas de sustitución y de
supresión, que fueron rechazadas por el resto de partidos políticos
de la Corporación.
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