ArtÃculo publicado en la última edición impresa del Camp de Morvedre, disponible aquÃ
Cada 8 de Marzo, considero que es un buen momento de hacer balance de lo avanzado en la igualdad real. La igualdad real comprende muchas áreas, que no sólo es la profesional, por supuesto.
Es cierto que a mà "me corresponde" hablar más desde la perspectiva empresarial, pero, al final, el balance de la igualdad que hago, que hacemos, es en todos los ámbitos.
Me referiré al ODS número 5, que habla sobre la igualdad de género: La igualdad entre géneros no es solo un derecho fundamental, sino la base necesaria para conseguir un mundo próspero y equitativo, además es fundamental para el desarrollo sostenible de la sociedad. Sin embargo, a pesar de los avances en las últimas décadas, las mujeres y niñas de todo el mundo siguen sin experimentar una igualdad de derechos real.
Lo cierto es que, en el plano empresarial, tanto como empresarias como directivas, incluso como representantes de colectivos empresariales, cada dÃa hay más presencia de mujeres, aunque claramente aún no hay paridad.
Además, la brecha salarial continúa siendo alarmante, en el informe realizado por EVAP a partir de los datos proporcionados por el Instituto Nacional de EstadÃstica en su última Encuesta de Estructura Salarial (EAES) del año 2021, señalan otros aspectos que evidencian una realidad laboral desfavorable para las mujeres como son salarios más bajos, peores condiciones contractuales y peores jubilaciones.
Según los últimos datos del INE, la brecha salarial en España es del 18,36% traduciéndose en 5.212 euros que las mujeres ganan de media menos que los hombres. El descenso en los últimos años es tan ligero que, de seguir asÃ, tardarÃamos más de dos décadas en acabar con esta brecha. En 2016 esta suponÃa el 22,3% y pasó al 18,36% en 2021. El dato es más alarmante en la Comunidad Valenciana, ya que está por encima de la media nacional suponiendo el 20,2%.
Por supuesto estos datos hablan de la igualdad de aquÃ, autonómica, nacional, pero es que, a la igualdad de género, no se le puede poner vallas, debemos observarla a nivel global.
Y viendo informes de la ONU, obtengo estos datos:
- 750 millones de mujeres y niñas se casaron antes de los 18 años.
- En 18 paÃses el esposo puede prohibir que su esposa trabaje.
- En 39 paÃses los derechos de herencia son diferentes para los hijos y las hijas.
- En 49 paÃses no existen leyes que protejan a la mujer de la violencia doméstica.
- La representación de la mujer en los parlamentos nacionales en todo el mundo es del 23,7%, lo que se sitúa muy lejos de la paridad.
De las mujeres casadas o en una unión, solo el 52% toma libremente sus propias decisiones sobre relaciones sexuales, anticonceptivos o atención médica.
Las mujeres que poseen tierras agrÃcolas son solo el 13% a nivel mundial.
En Asia Meridional, el riesgo de una niña a casarse en la infancia ha disminuido un 40% desde el año 2000.
Ojo, estos datos son de 2020, pero creedme, he contrastado alguno en estudios posteriores y no ha cambiado tanto, leyendo alguno de ellos sientes verdaderos escalofrÃos y en situaciones de crisis y guerras, no sólo es que la situación no avanza es que en muchos casos retrocede.
Debemos empoderar a nivel mundial, dar apoyo, reforzar el mensaje, a mujeres y niñas, no podemos mirar sólo al entorno más cercano y no podemos cerrar los ojos a otras realidades, trabajamos desde la globalidad en transacciones comerciales, en tecnologÃa, debemos trabajar también desde la globalidad en derechos y deberes, en sostenibilidad y por supuesto en igualdad y más concretamente en igualdad de género.