De todos es conocida mi debilidad por Almardá, la playa que me vio nacer en agosto, de hace ya, 43 años y de la que nunca me he separado.
He recorrido sus calles, de tierra, ahora asfaltadas en su mayoría, gracias a los gobiernos de PP, he disfrutado de de su gente, mis vecinos y de sus playas, mi pobre playa.
Dicen los del PSOE que Almardá, sus playas, nunca tuvieron arena, pero eso no lo dirán delante de mí. En esa playa aprendí a nadar, entrando "a pie" por su fina área…, pero dicen que Almardá no tenía arena. En esa playa aprendí a bucear y llegar a la playeta…, pero dicen que Almardá no tenía arena. En esa playa aprendí a pescar, cogiendo el cebo en la propia orilla con nuestras manos..., pero dicen que Almardá no tenía arena. En esa playa jugué a "guerras de niños", a "bolazo limpio" ..., pero dicen que Almardá no tenía arena. En esa playa aprendí a hacer castillos de altas torres con un cubo y una pala…, pero dicen que Almardá no tenía arena. En esa playa fui Teniente de Alcalde de Almardá y señores del PSOE: Almardá tenía arena y mucha arena. Lo que no tenía Almardá es un PSOE que engaña sistemáticamente a los vecinos, y a las asociaciones y que hizo oídos sordos a lo que decía la Valoración Ambiental de las obras de Almenara, que advertía expresamente, de que, si no se realizaba inmediatamente lo previsto para los municipios al sur, para las playas de Almardá, Canet y Puerto de Sagunto, habría problemas y nada han hecho. Las han dejado morir por sectarismo ecológico e ideológico.
Lo que no tenía Almardá era un Costas sectario como brazo ejecutor y como cómplice el equipo de gobierno, que no el ayuntamiento. Es la mayor agresión ecológica a nuestra costa en la historia. Lo que no tenía Almardá era a estos "trileros administrativos" que juegan con la costa poniendo parches, para tapar su incompetencia y el sectarismo de los que nos gobiernan, PSOE y Compromís. Que solo piensan en deslindar, expropiar y derribar sin ir al origen del problema.
Nosotros queremos proteger el hogar de nuestros vecinos y regenerar nuestras playas en un proyecto real que perdure en el tiempo. Queremos que se marchen todos aquellos que dicen que… Almardá no tenía arena.
