La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del
Territorio ha acordado ampliar el plazo de solicitud de subvenciones
para evitar la pobreza energética en hogares con riesgo de exclusión
social hasta final del ejercicio, tal y como publica el Diari Oficial de
la Comunitat Valenciana.
El objetivo de esta orden es la
concesión de subvenciones a los municipios, mediante concurrencia
competitiva, para evitar el corte de los suministros de energía
eléctrica, agua y gas a las familias más vulnerables, así como el
alquiler a las familias que han sido desahuciadas.
En este
sentido, hay que destacar que ya se ha iniciado el trámite de las
primeras resoluciones para proceder al pago de las ayudas, tanto para
garantizar suministros básicos como para el alquiler, y que ascienden a
un importe de 718.000 euros. Esto supone que, por el momento, 4.585
familias de toda la Comunitat se han beneficiado de estas ayudas de la
Generalitat que se tramitan a través de diferentes ayuntamientos.
Hay
que recordar que la Generalitat ha presupuestado este año, por primera
vez, ayudas para garantizar el acceso a los suministros básicos de
energía y agua potable a familias con riesgo de exclusión social.
"La Generalitat sitúa a las personas en el eje central de sus políticas"
Según
ha explicado la directora general de Vivienda, Rehabilitación y
Regeneración Urbana, Rebeca Torró, "este año se ha notado el cambio y la
sensibilidad de las administraciones públicas, sobre todo de la
Generalitat, que ha situado por primera vez a las personas en el eje
central de su política". Así, ha explicado que numerosas
administraciones, como diputaciones, ayuntamientos y el propio Gobierno
valenciano, han ofrecido ayudas contra la pobreza energética conscientes
de la necesidad de muchos ciudadanos. "Es una buena noticia que todos
trabajemos conjuntamente para ofrecer soluciones y luchar contra esta
problemática", ha apuntado Torró.
En este sentido, la
directora general ha valorado los resultados obtenidos porque "gracias a
la ayuda, se han beneficiado más de 4.500 familias de la Comunitat que
antes no tenían acceso a este tipo de recursos y lo seguirán haciendo
muchas más con la prórroga aprobada".
Sin embargo, la
directora general ha señalado que "queda mucho por hacer y también mucho
que aprender". En este sentido, ha advertido de que el Gobierno
valenciano siempre se ha mostrado "abierto a flexibilizar los criterios y
a trabajar conjuntamente con todas las administraciones con el objetivo
de mejorar". Según ha explicado, en el primer año de convocatoria de
estas subvenciones el proceso de adaptación y tramitación ha sido "más
costoso de lo habitual, y es necesario agilizarlo en futuras
convocatorias". Además, también se trabajará para reorientar la parte
correspondiente a alquiler para poder ampliar los beneficiarios.
Las ayudas se tramitan a través de los servicios sociales municipales
Los
destinatarios de la subvención son los municipios de la Comunitat
Valenciana. De esta forma, cuando los servicios sociales de los
ayuntamientos detectan el caso de una persona o familia en situación de
vulnerabilidad, con serias dificultades para el pago del suministro de
electricidad o de gas, o que ya ha sufrido la suspensión del suministro,
realizan una valoración para determinar si pueden ser beneficiarios de
la ayuda.
Si reúne los requisitos, los servicios sociales
lo ponen en conocimiento de las empresas suministradoras y de la
conselleria y se paraliza el procedimiento de suspensión del suministro
mientras se gestiona el pago de las facturas adeudadas.
Las
ayudas para evitar la pobreza energética son, en los casos de corte de
suministro eléctrico o de gas, de 75 euros por recibo mensual y hasta un
máximo de 300 euros por consumidor y año y, en caso de corte de agua
potable, hasta 15 euros por recibo mensual y un máximo de 60 euros por
consumidor y año. Asimismo, podrán ser objeto de ayudas los costes
ocasionados para restablecer los suministros, en el caso de que se haya
producido su corte.
En cuanto a las ayudas para el alquiler
social, que también se tramitan a través de los servicios sociales de
los ayuntamientos, la cuantía es de hasta 100 euros mensuales durante un
periodo máximo de un año, y en ningún caso podrá superar el importe de
la renta.
De estas ayudas para el alquiler y el suministro
energético, se podrán beneficiar las personas y unidades familiares y de
convivencia cuyos ingresos sean inferiores a 1,5 IPREM o con ingresos
inferiores a 2 IPREM si tienen reconocida alguna discapacidad o se
encuentran en situación de dependencia.
En el caso de
alquileres, además, previamente han de haber sido objeto de un
procedimiento de desahucio, ejecución hipotecaria o dación en pago, y
deben tener un alquiler al que no pueden hacer frente. Este alquiler
debe ser el que le ha ofrecido el banco, ayuntamiento o cualquier
entidad pública, y si se trata de con un particular, no superar los 250
euros al mes.
Los ayuntamientos y los ciudadanos pueden
consultar más información en www.habitatge.gva.es o llamando al teléfono
de información 012 donde se atenderán todas las dudas al respecto.