Las exportaciones continúan siendo el revulsivo
del sector metalmecánico, al registrar un incremento superior al 9,6% de enero a noviembre de 2011, respecto al
mismo periodo del ejercicio anterior. En
cuanto a los destinos, China ha duplicado el valor de sus compras y
Bélgica las ha aumentado en un 50%, según apunta el Informe de Coyuntura del
sector metalmecánico de la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana
(FEMEVAL) del cuarto trimestre de 2011.
En términos absolutos este incremento
supone cerca de 560 millones de euros más en exportaciones que el año pasado. Además
de la automoción, los productos más exportados han sido las calderas y
productos mecánicos, seguidos de la maquinaria y material eléctrico y las
manufacturas de fundición, hierro y acero. Las
partidas presentan un comportamiento dispar, con incrementos superiores al 30%
en las exportaciones de manufacturas de fundición y descensos del 18% en el
aluminio y sus manufacturas.
Este comportamiento
positivo contrasta con la actividad productiva, en la que, una vez más, denota
que la difÃcil coyuntura económica apenas da tregua a este sector. En este
sentido, las empresas del metal han cerrado
el ejercicio con una caÃda del 8,3%
en el cuarto trimestre de 2011.
Según el Informe de Coyuntura de FEMEVAL,
el descenso medio anual
de la producción ha sido del 0,6%, 2,2 puntos inferior al del conjunto de España. No obstante, y
aunque el año ha concluido con un
retorno a la tendencia negativa del inicio de la crisis, no se alcanzan los
acusados descensos de actividad cercanos al 14% de 2008 y 22% de 2009.
Todos los sectores
productivos del metal valenciano recuperan las tasas negativas, excepto el de maquinaria y
equipamiento mecánico. El material y equipo eléctrico, electrónico y óptico
lidera las caÃdas de producción con un 25% de descenso de octubre a diciembre
de 2011, y la metalurgia y fabricación de productos metálicos reduce su
crecimiento en un 10,8%.
Esta bajada de la
producción ha repercutido en el empleo
del conjunto del sector metalmecánico que se ha visto reducido en 8.750 personas
(de 192.500 ocupados en el tercer trimestre a los 183.750 del cierre del
ejercicio 2011). Al respecto, la ocupación en la industria ha descendido en 6.050 empleos
de octubre a diciembre de 2011. Esto significa una caÃda del 6,85% respecto al
trimestre anterior (88.200 frente a los 82.150 actuales). En términos
interanuales, y gracias al repunte experimentado de mayo a junio de más de
9.700 empleos, la variación respecto al mismo periodo de 2010 ha supuesto un
aumento del 5,18%, esto es, 4.050 empleos más.
En otros subsectores,
como los servicios del metal
(fontanerÃa, instalaciones en obras de construcción y eléctricas) ha aumentado un 9,9%, lo que supone 3.400 puestos de
trabajo más, y una ocupación total de 37.700 personas. En la venta y reparación del automóvil
también ha crecido en un 0,86%
frente al descenso del 18,2% en el
comercio al por mayor del metal.
La caÃda de las ventas, compras y del nivel
de inversiones también ha sido generalizado en todos los subsectores analizados.
Los factores que más acusan y repercuten en
las cuentas de resultados de las empresas son la debilidad de la demanda, asÃ
como la morosidad, los largos plazos de pago y la dificultad de acceso a
financiación externa.
Ante este panorama, los empresarios valoran con un 4,6 la situación del sector metalmecánico
valenciano, lo que supone continuar en cifras inferiores al aprobado.
Según indica el presidente de FEMEVAL, Vicente Lafuente, "necesitamos ya que las Administraciones públicas cumplan sus
compromisos de pago con las empresas, para evitar los acusados problemas de
financiación y tesorerÃa que estos impagos ocasionan y que, como se demuestra
en nuestro sector, se están traduciendo en pérdidas de empleo y en irreparables
cierres de empresas".
Expectativas para 2012
Según el estudio de FEMEVAL, a pesar de que
el sentimiento generalizado era de haber tocado fondo, las empresas coinciden
en que se enfrentan a una etapa de mayor
empeoramiento de la situación que dificultará su actividad en 2012.
Por
subsectores, las expectativas son muy desfavorables. En este sentido, las previsiones reflejan caÃdas acusadas tanto en las ventas como en
las compras de la industria y el comercio del metal en el primer trimestre
de 2012. Las inversiones siguen sin ser positivas y
son el indicador que peor comportamiento muestra desde el inicio de la crisis.
El empleo
tampoco presenta signos de mejora al reflejar la intención de los empresarios de reducir esta variable
en un 25,5%, frente a un 69,6% que intentará mantenerla.