De nuevo otra campaña electoral, nos habÃamos implicado con lo que acontecÃa en el PaÃs Vasco y poco después en Catalunya y ahora llega Europa. Esa misma Europa que muchos siguen viendo tan lejos y a los que habrÃa que recordarles cómo se notan sus efectos tan cerca.
Asà es, sà habÃamos asumido ese mantra de que 'tots els mals venen d'Almansa' (nos disculpen ahora los habitantes de esta noble y fronteriza villa manchega), ahora se trata de asimilar que las decisiones y sus consecuencias (ya sean malas o buenas), si lo llevamos al terreno económico... todas vienen de Europa y más concretamente, con epicentro en Bruselas.
Por tanto, si se abren las urnas para renovar el Parlamento Europeo, el próximo 9 de junio, tengamos todos presentes lo que nos jugamos, que es mucho. Que se lo pregunten a agricultores, a todos aquellos que participan de la cadena alimentaria, a la flota pesquera, a los que piensan en emprender en energÃas verdes, en movilidad, en tecnologÃa... A todos los que piensen en cualquier cosa, porque seguro que también son cuestiones que se abordan en Europa. A todos aquellos preocupados por competir en igualdad de condiciones y resulta que Europa ahà falla y suele incurrir en contradicciones. A los que esperan que la Unión Europea recupere un peso polÃtico que nos equipare frente a los dos grandes bloques: USA vs Rusia – China y rebaje la escalada bélica a la que someten al pueblo palestino o a Ucrania.
Acerquemos, pues, Europa a España y a nuestra Comunidad Valenciana. Ya saben, el próximo 9 de junio podemos traérnosla un poco más cerca de casa.