Fuentes de la Generalitat Valenciana han defendido hoy la actuación de sus agentes medioambientales frente a lo que califican de intentos de "tergiversación y manipulación" promovidos por la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, y "diversos sectores de la izquierda".
Desde la administración autonómica insisten en que tanto la Ley de Aguas como el Plan Especial de Inundaciones establecen de forma clara que la medición de caudales en ríos, barrancos, sistemas de regulación y zonas inundables es una función específica de la CHJ, siendo esta la administración hidráulica competente. En este marco, los municipios también participan, pero en un segundo término, según recuerdan.
Asimismo, el citado Plan deja claro que, ante una alerta hidrológica, corresponde a los ayuntamientos la responsabilidad de emitir los avisos a la población, informar de la situación y garantizar el alejamiento preventivo de las zonas inundables, además de mantener la vigilancia en puntos críticos de las vías de comunicación.
La Generalitat ha recordado que la CHJ dispone de agentes medioambientales propios, cuyas competencias incluyen funciones de policía de aguas, inspección, control del dominio público hidráulico, realización de aforos, control de crecidas e incluso toma de fotografías y grabación de imágenes. Concretamente ctian el artículo 94 de la Ley de Aguas, que establece que la vigilancia de los elementos del dominio público hidráulico debe ser ejercida por la administración hidráulica competente.
La propia CHJ, según indican estas mismas fuentes, informó que movilizó a sus agentes medioambientales ante la previsión de posibles avenidas. De hecho, el 29 de octubre, la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, afirmó que iban a "estar atentos a las zonas afectadas" y que "la Confederación del Júcar tiene monitorizados absolutamente todos los espacios".
Por su parte, también recuerdan que el director general de Medio Natural de la Generalitat ofreció ese mismo día –y dentro del cumplimiento del Plan Especial de Inundaciones– el despliegue de agentes medioambientales autonómicos como medida de apoyo, si fuera necesario, al seguimiento de caudales.
No obstante, desde la Generalitat se recuerda que no es función específica de sus agentes medioambientales la vigilancia de cauces y barrancos. Sus competencias están centradas en la asistencia a la ciudadanía en actuaciones autorizadas, tales como cortas, podas, quemas, desbroces o laboreos, así como el asesoramiento en la gestión de montes y fincas, y en ámbitos como la caza, la pesca, la flora, la fauna o las vías pecuarias.