El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha pedido que la obligatoriedad de la mascarilla se retire de forma tranquila y, si es posible, con acuerdo en el Consejo Interterritorial de Salud, y se tomen decisiones "sensatas y con sentido común".
Puig ha dicho que todos tenemos "muchas ganas" de poder quitarnos la mascarilla, pero tiene que ser "en el momento oportuno" porque no solo es una protección contra el coronavirus sino también "un símbolo de que aún estamos en pandemia".
"Hay que ser muy prudentes, los jóvenes tienen menos protección porque todavía no están vacunados, y hay que dar pasos seguros" que irían en primer lugar por levantar la obligatoriedad en espacios al aire libre, como playas y bosques.
En cualquier caso, ha afirmado, no debe abrirse "un debate que acabe siendo un barullo, un ruido, y que los ciudadanos no sepan muy bien a qué atenerse".
Por eso, ha dicho al ser preguntado por la mascarilla tras un acto de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, que hay que hacer "las cosas tranquilamente, si es posible con un acuerdo en el Consejo Interterritorial, y que se tomen decisiones sensatas y 'amb trellat'".