Un operador de comunicaciones en el Centro de Coordinación de Emergencias declaró ante la jueza que instruye la causa penal por la gestión de la dana que sobre las 12 horas del 29 de octubre "ya se percibÃa la situación de riesgo" y ya habÃa peticiones de rescates.
Este jueves se ha conocido la transcripción literal de la declaración de este testigo ante el juzgado el pasado lunes, en la que señala que cuando finalizó su turno de trabajo a las 14.30 horas la situación era igual de álgida, pero no recuerda que hubiera un desbordamiento de ningún rio, y no se habÃa convocado aun el Cecopi.
Ha explicado que los casos comienzan en la Ribera Alta y más tarde, sobre las 11 horas, se refieren a Utiel y Requena, y en concreto, que eran rescates de personas que estaban aisladas.
Su labor como operador de comunicaciones de Emergencias era activar el protocolo y enviar el documento que llega a los ayuntamientos.
Ha indicado que fue él quien envió el documento que activaba la situación 0 o 1 en Requena-Utiel, y también las alertas hidrológicas en el barranco del Poyo y el rÃo Magro, y aunque no recuerda qué superior le dio la orden, entiende que serÃa la entonces jefa de Servicio de Emergencias, Inmaculada Piles.
Este técnico ha dicho no recordar haber oÃdo o leÃdo nada sobre la activación de los bomberos forestales para vigilar barrancos.
Sà ha dicho recordar que vio a la entonces consellera de Justicia e Interior, Salomé Pradas, investigada en la causa penal, sobre las 12 horas, lo que no quiere decir que no estuviera mucho antes, y que les dijo que se alegraba de que no hubiera pasado nada personal.
También ha destacado que el 28 de octubre no se habló de reforzar el servicio de cara al dÃa siguiente, y ha indicado que en la última dana, se envió un ES-Alert el dÃa anterior y habÃa un sistema más reforzado de guardia, con más personas para cada puesto, más preventivo.
Este operador de comunicaciones señala que el 29 de octubre la Agencia Estatal de MeteorologÃa (Aemet) cambió el nivel naranja a nivel rojo "sin avisar", algo que no es habitual. Normalmente, ha dicho, el predictor de guardia tiene a bien llamar por teléfono previamente y decir que van a cambiar la predicción.