Las tormentas de granizo registradas ayer en diversas comarcas de la
Comunitat Valenciana tuvieron una incidencia especial-mente negativa sobre los
viñedos de Utiel-Requena, donde la superficie afectada en mayor o menor medida
ronda las 1.500 hectáreas, según una primera estimación efectuada por la
Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA).
La zona más castigada por
la piedra es una extensa franja de terreno comprendida entre los términos de
Camporrobles y Las Cuevas y, de acuerdo con los primeros testimonios recogidos,
en no pocas explotaciones se ha perdido la totalidad de la cosecha de uva para
vinificación de la próxima campaña. En estos momentos la mayor parte de los
racimos se encuentran ya cuajados, de tal manera que este último episodio de
pedrisco puede traducirse en una significativa merma de la futura vendimia.
Asimismo, se han apreciado daños en la madera de algunas cepas, una
circunstancia que también puede reportar consecuencias negativas de cara a
futuras temporadas.
El cultivo de la viña es
con diferencia el más perjudicado por este temporal, pero no el único. Los
cereales de la comarca, que estaban a punto de ser recolectados, han sufrido
igualmente los efectos de la violenta granizada. Hay que apuntar al respecto
que las temperaturas anormalmente altas que han caracterizado el pasado mes de
mayo ya habían tenido una incidencia tremendamente negativa sobre el desarrollo
del cultivo del cereal.
Las consecuencias de este
temporal pueden suponer un duro golpe para la economía de la comarca, por lo
que desde AVA-ASAJA se pide máxima celeridad a la hora de efectuar las
peritaciones de los daños y rapidez en el pago de los seguros para aquellos
agricultores que lo tuvieron suscrito. La entidad Agroseguro tiene previsto
desplazarse mañana hasta las áreas afectadas con un grupo de técnicos de
AVA-ASAJA para acometer una valoración más precisa del alcance de la tormenta.