El alcalde con concejales del equipo de gobierno. EPDA El
alcalde de Sagunto, Quico Fernández, junto a otros miembros del
equipo de gobierno, ha afirmado en rueda de prensa que “el problema
del Alto Horno no es una cuestión de dinero”, refiriéndose al
impago de 400 euros del seguro, sino “de legalidad”. La Fundación
Comunidad Valenciana del Patrimonio Industrial del Puerto de Sagunto,
encargada de la gestión del monumento y presidida por la conselleria
de Cultura, cuenta con una deuda de 100.000 euros que incluye el
impago de salarios a sus dos trabajadores desde abril de 2014. Por
esta razón, la fundación no puede recibir más subvenciones. Desde
el equipo de gobierno insisten en que es todo esto lo que hay que
solucionar.
Esta
fundación funcionaba con las aportaciones de sus patronos, como la
Generalitat Valenciana, el Ayuntamiento de Sagunto, ArcelorMittal,
Fundación Bancaixa, la Autoridad Portuaria de Valencia y el Centre
d’Estudis Camp de Morvedre. Desde 2012, la mayoría de entidades
privadas dejaron de aportar dinero y, además, la subvención
recibida por la Conselleria se redujo de 60.000 euros a 6.000 en los
últimos años. Dada la situación, Fernández asegura que “el
ayuntamiento no es responsable en absoluto de lo sucedido ya que es
el único que ha cumplido sus obligaciones con la fundación, yendo
incluso más allá de ellas, haciendo inversiones que no eran
competencia de este ayuntamiento”. En los últimos años, el
consistorio ha invertido alrededor de 880.000 euros en el Horno Alto,
la cubierta del museo industrial y el archivo de Altos Hornos del
Mediterráneo. A modo de ejemplo, la delegada Mónica Caparrós ha
apuntado que el ayuntamiento ya lleva gastados 90.000 € en la
preservación y traslado de los fondos del archivo.
El
alcalde ha destacado su voluntad por solucionar el problema: “vamos
a hacer funcionar el Museo Industrial y las visitas al Horno Alto.
Queremos que la fundación se ponga al corriente de pago”.
Por
su parte, el conseller se ha comprometido a convocar a todos los
miembros de la fundación para comprobar quién quiere continuar
financiándola y asegurándose de que cumplen con sus obligaciones.
En caso de que esta solución no sea posible, Fernández ha mostrado
su disposición a que el ayuntamiento se haga cargo de la gestión de
este patrimonio industrial. Para ello, el equipo de gobierno entiende
que debería contar con la transferencia de fondos correspondiente
por parte de la Generalitat. Otra posible solución sería que esta
competencia la asumiera directamente la conselleria.
El
alcalde señala la “mala gestión del Partido Popular como gran
responsable de la situación”. En esta línea, Pablo Abelleira,
concejal delegado de Patrimonio Cultural, ha criticado la reducción
que hizo el gobierno del PP de las aportaciones de la Generalitat a
la fundación, que pasaron de 60.000 a 6.000 euros.
Teresa
García pregunta al Consell
La
concejala y diputada autonómica Teresa García ha preguntado al
Consell sobre la deuda de la conselleria con la fundación, las
cantidades presupuestadas desde 2011 para su funcionamiento y si ha
previsto algún tipo de actuación.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia