El
órgano más grande del cuerpo humano es la piel, y quizás, es uno de los que
menos cuidamos. Este hecho es una irresponsabilidad, ya que hay que dar a la
piel todo lo que necesita y poder seguir una rutinas de cuidado que hará que se
mantenga sana y con buen aspecto. Una buena manera de comenzar a cuidar
la piel, además de seguir unos hábitos diarios, la de aplicar los mejores
productos que puedes encontrar en
.
En
este artÃculo vamos a desfilar cuáles son las mejores rutinas para el cuidado
de la piel, asà como derribar algunos mitos que están plenamente
interiorizados y que no ayudan en absoluto al cuidado de esta. ¿Sabes
que el sol no es un buen amigo de tu peil? ¿O que beber mucha agua no tiene
efecto sobre ella?
Cuidar
tu piel es sencillo si sabes cómo
Nuestra
piel necesita de los mejores productos que les podamos dar. ArtÃculos como
cremas hidratantes, exfoliantes, cremas antiedad, sérum o fotoprotectores, son
solo alguno de los productos necesarios para que nuestra piel. Se mantenga en
perfecto estado. Siempre es muy recomendable acudir a la farmacia a
recibir consejo, o bien hacer caso a lo que nos diga nuestro dermatólogo, que
es el profesional que mejor puede ayudarte.
En
el caso de los productos destinados a cuidar nuestra piel, siempre hemos de
tener presente que debemos dar lo que la piel nos está pidiendo, es decir, los
mejores productos. Nunca es conveniente adquirir artÃculos de cuidado de la
piel en sitios que no inspiran confianza o en los que no nos puedan dar una
orientación adecuada.
Pero
tan importante como saber darle los mejores productos, es la de seguir una
adecuada rutina de higiene, hidratación y cuidados. Con ello
conseguiremos que nuestra piel sea esa barrera protectora tan útil y que debe
estar siempre en perfecto estado.
La
rutinas del cuidado de la piel pasan por hacer caso a estos consejos:
- El
sol, mucho cuidado. La relación del sol y la piel nunca es beneficiosa a
largo plazo. Siempre se ha visto a una piel bronceada como sinónimo de piel
saludable, cuando no es asÃ. Debemos aplicar fotoprotector todos los dÃas del
año, sÃ, todos los dÃas independientemente de la estación.mEl impacto de los
rayos UVA y UVB sobre la piel hace que se generen radicales libres, que oxidan
las células y las debilitan. Referido al factor de fotoprotección, este
ha de ser elegido dependiendo del fototipo de la piel, ya que cada persona
necesita uno diferente. En nuestra farmacia podrán aconsejarnos adecuadamente
sobre cuál es el filtro solar que necesitamos. Por esa misma razón, no tiene
porque ser mejor un fotoprotector de mayor Ãndice que otro. Independientemente
del que usemos, siempre ha de renovarse cada dos horas. De nada vale ponerse
uno de factor 50 si no somos capaces de ir reponiendo lo que la piel absorbe.
Dicho de otra manera, un factor 50 no protege el doble con factor 20. Por otro
lado, aplica el fotoprotector entre 10 y 30 minutos antes de salir a la calle,
con ello conseguirás que la piel absorba adecuadamente el producto.
- En
el cuidado de la piel ha de primar sobre todo la hidratación. Por
eso, si has de aplicarte más de un producto, te pondrás siempre primero la
crema hidratante, que es lo que sea sobre mejor. Seguidamente, te aplicarás la
crema fotoprotectora. Sigue siempre este orden para hacerlo de la manera
correcta.
- Existe
una gran gama de cremas con vitamina C, que consiguen aportar luminosidad a nuestro
rostro. Siempre elegiremos una que tenga una concentración entre el 5 y
el 10 %, y será aplicada de manera previa al fotoprotector. Tu farmacéutico te
indicará cuál es la que más te conviene según tu tipo de piel y como has de
aplicarla.
- La
exfoliación siempre es necesaria para retirar los restos de células muertas.
Los productos con base de ácido glicólico y retinol son los más adecuados para
realizar este proceso. Recuerda que debes hacerlo antes de irte a dormir.
- Cuidar
de la piel empieza de una manera muy sencilla, realizando ejercicio regular y
aportando a nuestro cuerpo una alimentación basada en productos naturales.
A poco que sigas esta rutina, comprobarás como la calidad de tu piel aumenta.
El
deterioro de la piel es un proceso irreversible, por eso, cuidarla ha de ser
una rutina que se ha de empezar desde bien joven. Si fomentamos este tipo de
hábitos, es bastante más probable que ese niño cuando se haga adulto sea capaz
de seguir manteniendo esa rutina de cuidado.
Productos
de calidad, ser muy constantes y proteger nuestra piel de los dañinos rayos del
sol, son los tres pilares básicos para que nuestra piel siga haciendo su
función en las mejores condiciones, y llegue al ocaso de nuestra vida en un
estado más que aceptable.