Enrique Lozoya. EPDADiferentes razones explican el porqué de pertenecer a Ciudadanos (Cs). La primera, nuestro empeño en hacer política útil en la oposición. Nos rebelamos profundamente contra la idea de que desde la oposición poco o nada se puede hacer. Muy al contrario, hemos de trabajar arduamente para buscar el error del gobierno, detectarlo y denunciarlo; pero no solo eso, hemos de proponer soluciones al problema.
En segundo lugar, porque Ciudadanos es un partido donde la mayoría de integrantes provenimos de la sociedad civil, cansados del bipartidismo, del nacionalismo y del populismo, pensamos en ser útiles. Así, en Cs la entrada y salida es sencilla y habitual porque somos conscientes de que estamos de paso, de que lo importante son las ideas y no las personas, y de que tarde o temprano volveremos a nuestras ocupaciones laborales. Esto nos hace libres, algo que no les ocurre en otros partidos porque tienen en la política su modo de vida.
En tercer lugar, porque desde Ciudadanos trabajamos para abrir una "tercera vía, la liberal", que cree firmemente en las políticas sociales, y al mismo tiempo en la iniciativa privada y en la colaboración público-privada como ejes fundamentales de una sociedad libre, constitucionalista y democrática.
En este sentido, en mi corta experiencia como concejal de oposición, una de las situaciones que más me ha llamado la atención, es comprobar cómo los demás grupos políticos, se sorprenden cuando nos ofrecemos a trabajar con cualquiera de ellos para mejorar Xirivella. Nos dicen que "eso no es posible", que tenemos que posicionarnos como derecha o izquierda porque el "centro no existe". Lamentablemente, están muy lejos de entender nuestra forma de hacer política, pues únicamente se limitan a defender las doctrinas de sus partidos.
Sin duda, Cs molesta porque no polariza, que es lo que interesa al bipartidismo, pues saben que esta circunstancia les facilitará cíclicamente la oportunidad de gobernar. No obstante, Cs es necesario porque es capaz de fiscalizar y controlar a los dos grandes partidos forzándolos a trabajar, evitando sus desmanes y actuaciones caprichosas.
En definitiva, somos de Ciudadanos porque nos sentimos libres, porque creemos firmemente en la política de consenso y no en la imposición absolutista de unas ideas partidistas. Nuestra máxima a nivel local está claramente establecida: "Si es bueno para Xirivella es bueno para Ciudadanos".
