Un hombre se refresca en una fuente, en una imagen de estos días. EFE-Quique García
Las muertes atribuibles a las altas temperaturas en la Comunitat Valenciana durante los primeros veinte días de este julio ascienden a 116, frente a las 19 que se produjeron durante el mismo periodo del pasado año, en un verano en el que se están registrando máximas y mínimas significativamente altas.
Del 1 al 20 de julio de 2025, el MoMo, sistema de vigilancia de la mortalidad diaria del Ministerio de Sanidad, ha contabilizado en toda España 905 fallecimientos que se pueden atribuir a temperaturas, 116 de ellas en la Comunitat Valenciana.
Por provincias, Alicante es la que ha registrado la cifra más alta de fallecimientos, 67; seguida de Castellón, con 37, y la provincia de Valencia, con 12 muertes.
La mayoría de muertes por temperaturas se produjeron durante los primeros diez días de julio de este año, 91, especialmente el 7 de julio, cuando se contabilizaron 12 fallecimientos; los días 5, 6 y 8 de julio, con diez muertes cada uno de ellos; o los días 3, 4 y 9 de julio, en cada uno de los cuales murieron 9 personas.
Del 10 al 20 de julio fueron 25 las personas fallecidas por altas temperaturas, según los datos recogidos en el MoMo.
Las cifras de julio de este año contrastan con las registradas en el mismo periodo de tiempo de 2024, cuando se produjeron 19 muertes atribuibles a temperaturas, de las que 14 se produjeron en la provincia de Alicante, 3 en la de Castellón y 2 en la de Valencia.
También en los primeros veinte días de julio del año 2023 hubo 44 muertes atribuibles a temperaturas en la Comunitat Valenciana -43 en la provincia de Valencia y una en la de Castellón-, y en el mismo periodo del 2022 se produjo la misma cifra, 44 fallecimientos (28 en Alicante, 13 en Castellón y 3 en Valencia).
Julio está siendo un mes con temperaturas significativamente altas, tanto las mínimas con las máximas, y este último fin de semana ha sido "muy adverso", especialmente en Alicante y Valencia, con temperaturas muy altas, humedad muy baja, viento de poniente y riesgo extremo de incendios forestales.
