Manuel Martínez.--EPDAHas perdido en un siglo más de la mitad de la población, el colegio pierde maestros por falta de niños, la población está envejecida, las horas de consulta de médico y enfermera disminuyen, el trabajo escasea y la gente ve el futuro lejos del lugar que le vio crecer. Puede ser la radiografía de cualquier pueblo de interior como el mío.
Ante esta situación lo más sencillo es lamentarse y resignarse ante el negro horizonte que se vislumbra pero os aseguro que esta opción no os hará felices. Puede que sea una visión realista para algunos, para mí, pesimista. No se trata de ver el problema sino la solución y luchar por ello, es decir, ver el lado bueno de las cosas.
El trabajo no me llegará a casa, voy a buscarlo; cada vez hay menos gente, encontraré incentivos para que vuelva; me faltan servicios municipales, tengo que conseguir aumentar el padrón; mi pueblo está en medio de la montaña, tiene mejor calidad de vida. Puede parecer una visión optimista pero no es así, sólo es lo que creo y deseo. Ahora bien, uno sólo no puede conseguir muchas cosas, en el grupo está la fuerza. Si trabajo, si encuentro mi incentivo, si me empadrono y si veo las bondades de mi pueblo pero nadie me sigue, no solucionaré nada. Eso sí, estaré tranquilo conmigo mismo y cuando miré hacia atrás estaré feliz y contento de ver lo que he hecho.
Creo que para cada persona pueden haber muchas ciudades pero pueblos, sólo uno, merece la pena luchar por él. Las personas esperamos que nuestro pueblo nos aporte muchas cosas pero raramente nos paramos a pensar aquello que nosotros le podemos aportar a él. Ya lo dijo John F. Kennedy "No preguntes lo que tu país puede hacer por ti; pregunta lo que tú puedes hacer por tu país."
Si nos quedamos sentados a esperar que esas cosas lleguen quizás nunca lleguemos a verlas; si nos levantamos y vamos a buscarlas pueden que lleguen o que no, pero seguro que estamos más cerca.
Simplemente es la opinión de un humilde servidor y quizás estas líneas estén mediatizadas por el cargo que ahora ostento pero os aseguro que son aplicables a la vida en general. Lucha por lo que crees, sé positivo, la gente que te quiere te lo agradecerá; y créeme, funciona, de no ser así ahora no sería lo soy, Alcalde.
