El 25N, se celebra el DÃa Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. La verdad es que en este contexto la palabra celebrar no transmite alegrÃa, si no que es una forma de conmemorar con un pensamiento optimista algo que nunca deberÃa suceder. Han sido y continúan siendo muchos años de lucha en el que las mujeres exigimos un lugar en la sociedad igual que el del hombre, no más, pero tampoco menos.
Con estas lÃneas quiero ponerme al lado de todas esas mujeres que en silencio, padecen dÃa tras dÃa cualquier tipo de violencia, también en nuestro paÃs y en los mas avanzados del mundo, por lo que no debemos de bajar la guardia, pero tampoco debemos permitir que esta violencia contra la mujer se justifique a través de una religión, una costumbre o una tradición. Debemos liderar desde los paÃses que mas desarrollados estamos esa lucha por poner a cada mujer en el lugar social que le corresponde de igual a igual que con un hombre.
Volviendo a nuestro paÃs y en concreto a los municipios como Meliana, que somos los primeros a quienes van a recurrir aquellas mujeres que están pasando por este calvario y es por ello que debemos articular todos los recursos en nuestra mano para estar preparados en caso de afrontar cualquier suceso de está Ãndole.
La violencia no entiende de géneros, solo de violencia y por lo tanto tampoco deberÃa de entender de colores polÃticos, es por ello que en este tema la unidad de todos es algo primordial y ante lo que no se debe perder el tiempo en confrontaciones ideológicas.
En este tema todos y todas somos UNA y esos cobardes que solo se atreven a mostrar su supuesta superioridad en forma de violencia tanto fÃsica o sexual como psÃquica contra una mujer, deberÃan de ser apartados de la sociedad más pronto que tarde porque recuerda, cada vez que una mujer sufre cualquier tipo de violencia, la sociedad se resquebraja, y nuestra forma de vivir de ser y existir, se tambalea.
Por eso y porque esas mujeres valientes precisan nuestra ayuda, si están en peligro defenderlas y recuerda que toda la sociedad está junto a ti y que esa pesadilla tiene un final.